Moscú.- La compañía aérea rusa estatal Aeroflot se ha hecho por un simbólico rublo con el 75% de su competidora Transaero, que se encuentra actualmente en graves dificultades económicas, próximas a la suspensión de pagos.
Transaero al 31 de diciembre tenía una deuda de unos 1.000 millones de euros. Airbus renunció el mes pasado a entregar un A380 a la compañía rusa.
En los seis primeros meses del año, Transaero, la mayor compañía privada de Rusia, transportó a 5,7 millones de pasajeros respecto a los casi 11 millones de Aeroflot. Sus trayectos abarcaban tanto el mercado interior como la mayoría de capitales europeas o destinos de vacaciones como el Caribe o Tailandia.
Transaero explicó en un comunicado que su adquisición por parte de Aeroflot se produce “en interés por desarrollar la aviación comercial y crear uno de los más grandes grupos de aerolíneas en el mundo”.
La operación está respaldada por el Gobierno ruso y se enmarca en el intento del país por rescatar a la segunda compañía aérea rusa de su delicada situación financiera. A través de Aeroflot, Rusia busca para mantener su mercado aéreo y permitir la viabilidad de su aviación comercial.