Bruselas.- La Comisión Europea ha obligado a las compañías aéreas Ryanair y Transavia a devolver al Estado francés las ayudas ilegales recibidas en los aeropuertos de Pau, Nimes y Angulema.
La Comisión ha llegado a la conclusión de que Ryanair, en los aeropuertos de Nimes y Angulema y, en el caso de Pau, Transavia, han recibido una ayuda de Estado incompatible con las normas de la UE. El análisis de la Comisión ha demostrado que estas compañías aéreas han pagado menos de los costes adicionales asociados a su presencia en los aeropuertos. Por tanto, estas compañías aéreas se han beneficiado de una ventaja económica desleal, lo que distorsiona la competencia en el mercado único.
Francia debe hacer recuperar la ayuda incompatible de las empresas que han recibido con el fin de restablecer una competencia leal
Bruselas ha adoptado seis decisiones sobre ayudas estatales concedidas a aeropuertos y compañías aéreas de Francia y Alemania. Se basan en las nuevas directrices de la Comisión en esta materia adoptadas en el pasado mes de febrero, como parte de la estrategia de modernización de la política de la ayudas estatales de la UE.
La Comisión tuvo en cuenta la importancia de los aeropuertos regionales a la accesibilidad, así como la necesidad de mantener una competencia leal en el desarrollo económico del sector. Bruselas ha autorizado la ayuda estatal concedida a los aeropuertos de Dortmund, Leipzig Halle, Niederrhein-Weeze.
El vicepresidente de la Comisión responsable de la competencia, Joaquín Almunia, dijo: "Las normas de la UE sobre ayudas estatales en el sector de la aviación permiten a las autoridades públicas que proporcionen apoyo público cuando se justifica , es decir, cuando se mejora la accesibilidad de una región y satisface las necesidades de los ciudadanos en el transporte. En cambio, el dinero de los contribuyentes no se debe utilizar para conceder una ventaja injusta a algunas compañías aéreas, distorsionando así la competencia en el mercado único europeo ".
La Comisión también ha ampliado el alcance de su investigación sobre una posible ayuda estatal a Ryanair en el aeropuerto de Klagenfurt (Austria).