Washington.-La Nasa presentó la primera grabación obtenida por la sonda espacial Voyager 1 tras su salida al espacio interestelar. En la grabación se percibe el sonido del plasma interestelar vibrando por la explosiones del Sol, una evidencia de que la sonda salió del sistema solar.
El pasado jueves la Nasa confirmó que la sonda Voyager abandonó en agosto de 2012 el sistema solar convirtiéndose oficialmente en el primer objeto hecho por el hombre que se ha adentrado en el espacio interestelar. La sonda de 36 añ;os de edad estaría a unos 19.000 millones kilómetros del Sol. Nuevos e inesperados datos indican que Voyager 1 ha estado viajando durante un añ;o a través de plasma o gas ionizado, presente en el espacio entre las estrellas.
Voyager se encuentra en una zona de transición fuera de la burbuja solar, donde algunos de los efectos de nuestro Sol siguen siendo evidentes. La sonda de la Nasa detectó por primera vez el aumento de la presión del espacio interestelar en la heliosfera, la burbuja de partículas cargadas que rodean el sol que va mucho más allá de los planetas exteriores, en 2004. Entonces, los científicos intensificaron la búsqueda de pruebas de la llegada de la nave interestelar, conociendo que el análisis e interpretación de datos podría llevar meses o añ;os.
Voyager 1 no tiene un sensor de plasma de trabajo, por lo que los científicos necesitaban una forma diferente de medir el ambiente de plasma de la nave para tomar una determinación definitiva de su ubicación. Una eyección de masa coronal o una explosión masiva de viento solar y campos magnéticos, que surgió del Sol en marzo de 2012 proporcionó a los científicos los datos que necesitaban. Cuando este regalo inesperado de que el Sol finalmente llegó al lugar de la Voyager 1 trece meses después, en abril de 2013, el plasma alrededor de la nave espacial comenzó a vibrar como una cuerda de violín. El 9 de abril, el instrumento de ondas de plasma de la Voyager 1 detectó el movimiento. El paso de las oscilaciones ayudó a los científicos a determinar la densidad del plasma. Las oscilaciones particulares significaban que la nave estaba bañ;ada en plasma más de 40 veces más denso de lo que habían encontrado en la capa externa de la heliosfera. La densidad de este tipo es de esperar en el espacio interestelar.
El equipo científico de ondas de plasma revisó sus datos y encontró un anterior, más débil conjunto de oscilaciones en octubre y noviembre del pasado añ;o. A través de la extrapolación de la densidad del plasma medido de los dos eventos, el equipo determinó que Voyager 1 entró por primera vez el espacio interestelar en agosto de 2012.
"Literalmente, saltamos de nuestros asientos cuando vimos estas oscilaciones en los datos, que nos mostraron que la nave se encontraba en una nueva región, comparable a lo que se esperaba en el espacio interestelar, y totalmente diferente a la de la burbuja solar. Está claro que había pasado a través de la heliopausa," dijo Gurnett.
"Voyager ha llegado a alcanzar lugares donde ninguna otra sonda ha llegado antes, marcando uno de los logros tecnológicos más importantes en los anales de la historia de la ciencia espacial y añ;adiendo un nuevo capítulo en los sueñ;os y esfuerzos científicos del ser humano," dijo John Grunsfeld, administrador asociado de la Nasa para la ciencia en Washington.
Los científicos no saben cuándo Voyager 1 alcanzará la zona tranquila de espacio interestelar, donde no hay influencia de nuestro Sol. Asimismo, no están seguros de cuándo esperar que la Voyager 2 cruce el espacio interestelar, pero creen que no está muy lejos.