Albacete.- El pasado domingo en la Base Aérea de Albacete el Ejército del Aire españ;ol organizó una jornada de puertas abiertas para dar oficialmente la baja operativa de los últimos aviones Mirage F-1 que han estado en servicio en las Alas 14, 11 y 462 Escuadrón.
A pesar de que la hora prevista para iniciar la jornada eran las 10:30, la gran afluencia de público provocó que las puertas se abrieran poco antes de las 10:00. A las 11:00 se realizó un emotivo acto de homenaje a los pilotos españ;oles del Mirage F-1, que fallecieron a lo largo de los 38 añ;os de servicio de este avión.
Dicho acto estuvo presidido por el Jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, general Francisco Javier García Arnáiz, quien estuvo acompañ;ado por la alcaldesa de Albacete, Carmen Bayod; el consejero de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Marcial Marín; y el presidente de la Diputación Provincial de Albacete, Francisco Núñ;ez, entre otras autoridades civiles y militares.
Con el lanzamiento de los componentes de la Patrulla Acrobática Paracaidista del Ejército del Aire (PAPEA), ubicada en la Base Aérea de Alcantarilla, se inició el apartado de exhibiciones. A continuación, la Patrulla Acrobática de helicópteros del Ejército del Aire, la Patrulla Aspa, realizó una espectacular exhibición, en la que quedó patente la alta cualificación de los pilotos y la versatilidad de las aeronaves del Ala 78 de Granada.
El siguiente avión que participó fue el Canadair del 43 Grupo de Fuerzas Aéreas, que realizó una descarga de agua, acción que les caracteriza cada vez que se enfrentan a la extinción de un incendio. Uno de estos aviones está desplegado, durante la temporada estival, en la Base Aérea de Albacete.
Finalmente, la siempre espectacular Patrulla águila, con sede en la Academia General del Aire de San Javier, llevó a cabo el nuevo programa de la temporada 2013, que incluye un gran número de acrobacias muy aplaudidas por todos los asistentes.
El colofón a esta jornada lo marcó la pasada aérea de una formación encabezada por tres Mirage F1, acompañ;ados de tres Eurofighter y la Patrulla águila. Una vez en el suelo se vivió el irrepetible momento en el que se simbolizó el final de la vida operativa de los Mirage, donde los últimos pilotos de F-1 dieron novedades del vuelo al JEMA y se procedió a la imposición de una corona de laurel al ya histórico avión.