La segunda etapa del Falcon 9 de SpaceX lanzado el pasado vienes con 20 satélites Starlink realizó su primer encendido de manera normal, sin embargo, se produjo una fuga de oxígeno líquido en la segunda etapa, según confirma ahora la compañía lanzadora.
Después de un reencendido planificado del motor de la etapa superior para elevar el perigeo (o el punto más bajo de la órbita), el motor de vacío Merlin experimentó una anomalía y no pudo completar su segundo encendido. Aunque la etapa sobrevivió y aún desplegó los satélites, no logró alcanzar su órbita con éxito, pero sí se colocó como se hace normalmente al final de cada misión. Esto dejó a los satélites en una órbita excéntrica con un perigeo muy bajo de 135 kilómetros, que es menos de la mitad de la altitud de perigeo esperada.
El equipo trabajó durante la noche para establecer contacto con los satélites y enviarles las órdenes de encendido, pero los satélites quedaron en un entorno de enorme resistencia a solo 135 kilómetros sobre la Tierra (cada paso por el perigeo eliminó más de cinco kilómetros de altitud del apogeo de la órbita, o el punto más alto en la órbita del satélite). Con este nivel de resistencia, es poco probable que nuestro empuje máximo disponible sea suficiente para elevar con éxito los satélites. Por lo tanto, los satélites volverán a entrar en la atmósfera de la Tierra y desaparecerán por completo. No representan una amenaza para otros satélites en órbita ni para la seguridad pública.
La primera etapa del Falcon 9 funcionó de manera normal, llevando la segunda etapa y los satélites Starlink a la órbita, separándose de la segunda etapa como se esperaba y regresando a la Tierra para un aterrizaje exitoso en una plataforma marina, lo que representa la recuperación número 329 de un cohete de clase orbital de SpaceX hasta la fecha.
“Este evento es un recordatorio de lo desafiante que es técnicamente el vuelo espacial. Hasta la fecha, hemos completado 364 lanzamientos exitosos de Falcon, que transportaron de manera segura a astronautas, cargas útiles de clientes y miles de satélites Starlink a la órbita, lo que convierte a la familia de cohetes Falcon en una de las más confiables del mundo”, señala la compañía lanzadora.
SpaceX realizará una investigación completa en coordinación con la FAA, determinará la causa raíz y tomará medidas correctoras para garantizar el éxito de futuras misiones. Con una sólida capacidad de producción de satélites y cohetes y una alta cadencia de lanzamiento, estamos posicionados para recuperarnos rápidamente y continuar nuestro ritmo como el proveedor de servicios de lanzamiento más activo del mundo.