La compañía española Sateliot tiene previsto lanzar este martes The GroundBreaker, el primer satélite LEO de la historia con el estándar 5G que servirá para democratizar el acceso al internet de las cosas. El lanzamiento, que abrirá el camino a la constelación de 64 satélites que la empresa desplegará en los próximos 18 meses, se producirá desde la Base Vandenberg de la Fuerza Espacial de EEUU en California, con un cohete Falcon 9 de SpaceX.
La compañía ha elegido un dragón de múltiples colores que escupe fuego al estilo de Gaudí como la insignia de esta misión. Este dragón simboliza fuerza, seguridad y conocimiento y recuerda al artista catalán y a Barcelona, en un claro guiño a los orígenes de una empresa como Sateliot, que nació allí, pero que tiene presencia y vocación global como lo demuestra su sede en San Diego.
The GroundBreaker permitirá que los dispositivos 5G IoT actuales que funcionen con la red de los operadores de telefonía móvil, se puedan conectar directamente a los satélites cuando se encuentren sin cobertura en modalidad roaming, y esto a un precio que es una fracción de lo que las conexiones satelitales han sido hasta ahora.
El satélite se ensambla dentro de un deployer o ‘Sistema de puesta en órbita’ que después va a bordo del cohete. Se trata de una caja donde se introduce el satélite inactivo. Este deployer contiene los mecanismos que impulsarán al satélite al espacio una vez llegue a su órbita.
The GroundBreaker ha sido cuidadosamente ensamblado en este deployer en una sala blanca, libre de contaminantes externos. Es importante destacar que este deployer va conectado a un sequencer o ‘secuenciador’ que es el sistema encargado de dar la orden final para eyectar el satélite. Una vez que se haya lanzado el cohete y este alcance la posición programada, el sequencer dará la orden de expulsión del satélite y el deployer lo expulsará y activará. El satélite se irá alejando y el suministro eléctrico comenzará a llegar a los subsistemas principales del satélite.