En un importante avance para la propulsión aeroespacial sostenible, el motor MPGE (Multi Purpose Green Engine), diseñado para ser más amigable con el medio ambiente, ha superado con éxito sus primeras pruebas de ignición de bipropelente. El prototipo del motor, desarrollado en Italia, utiliza peróxido de hidrógeno y queroseno como propelentes.
El proyecto se enmarca dentro del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia (PNRR) y es liderado por Avio, con la coordinación de la Agencia Espacial Italiana (ASI) y la colaboración de pequeñas y medianas empresas, universidades y startups. Este motor, que busca ser una solución versátil y ecológica, está destinado a aplicaciones tanto en sistemas de lanzamiento como en misiones espaciales orbitales y suborbitales.
Recientemente, Avio ha realizado las primeras pruebas de ignición del motor en un banco de pruebas, también desarrollado dentro del proyecto. Durante las pruebas, el motor alcanzó las condiciones térmicas estables previstas y la presión de cámara esperada, logrando una eficiencia de combustión superior a las expectativas iniciales. Además, el motor completó con éxito una secuencia estable de ignición y apagado, y se validó la precisión del modelo de enfriamiento regenerativo.
Este hito marca un paso crucial en el desarrollo de un sistema de propulsión innovador que podría tener un impacto significativo en la sostenibilidad de la industria espacial. Con su enfoque en la eficiencia y el respeto al medio ambiente, el MPGE podría convertirse en una opción clave para futuras aplicaciones espaciales.