Los ocho tripulantes de un carguero ucraniano Antonov An-12 fallecieron al estrellarse el pasado sábado cerca de la ciudad de Kavala, al norte de Grecia, según informó la Autoridad de Aviación Civil del país heleno.
Según la agencia de noticias ANA-MPA, el piloto del avión siniestrado había informado de un fallo en uno de sus motores, por lo que solicitó autorización para realizar un aterrizaje de emergencia. Sin embargo, nunca llegó a realizarlo, debido a que uno de sus propulsores se incendió y se acabó estrellando poco después.
El avión, que había despegado de Serbia y se dirigía a Bangladesh, operado por la aerolínea de carga ucraniana Meridian, tenía previsto realizar escalas en Jordania, Arabia Saudita e India antes de llegar a su destino final en Dhaka, la capital de Bangladesh
Las autoridades griegas aseguran que el avión transportaba 11 toneladas de armamento y munición, incluidas minas terrestres. Fuentes de Protección Civil alertaron a la población de la zona a mantener las ventanas de las viviendas cerradas y no encender el aire acondicionado.
