Airbus ha sido pionera en los sistemas de propulsión eléctrica que continúan abriendo nuevos horizontes para los satélites y las sondas del espacio profundo. La introdujo en el espacio a principios de este siglo, con su uso para el «mantenimiento de la estación» de los satélites de telecomunicaciones, conservando estas plataformas de retransmisión en sus posiciones orbitales adecuadas mientras giran alrededor de la Tierra.
Airbus ha evolucionado continuamente la tecnología durante los últimos 20 años, con un gran avance en 2017 cuando se lanzó la nave espacial de telecomunicaciones Eutelsat 172B totalmente eléctrica. El innovador sistema de propulsión totalmente eléctrico de Eutelsat 172B permitió un ahorro del 40% en la masa del satélite en el momento del despegue, lo que permitió llevar a bordo más capacidad de retransmisión para mejorar los servicios de comunicaciones. Además, esta nave espacial tomó una vía rápida récord para ponerse en órbita y consumió seis veces menos propulsor que un satélite con propulsión química tradicional.
Hoy, esta tecnología está abriendo los límites aún más al ayudar a la humanidad a investigar los misterios del Sistema Solar, como la sonda europea BepiColombo, actualmente en ruta hacia el planeta Mercurio impulsada por un sistema de propulsión eléctrica. Sin él, BepiColombo podría haber sido una nave espacial mucho más grande, y con el tamaño y el peso de los factores clave de la nave espacial para permitir el lanzamiento, esto podría haber sido un obstáculo para enviar este viajero de larga distancia al planeta rocoso más pequeño y menos explorado en nuestro vecindario espacial.
Airbus está desarrollando ahora un sistema totalmente eléctrico para la ambiciosa misión internacional de retorno de muestras de Marte que traerá las primeras muestras de rocas de Marte. Este sistema de propulsión eléctrica, tres veces más potente que el utilizado en la misión Mercurio, impulsará la nave espacial Earth Return Orbiter para llegar al Planeta Rojo y luego la impulsará de regreso a casa con su preciada carga recolectada de la superficie marciana.
Mirando hacia las próximas fronteras, la propulsión eléctrica seguirá siendo un habilitador clave en el espacio, porque en Airbus, estamos para lo que viene.