La penúltima pieza de hardware para el vuelo de prueba Artemisa I llegó al Centro Espacial Kennedy de la agencia en Florida. El adaptador de la etapa del vehículo de lanzamiento (LVSA) conecta la etapa central del cohete Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la Nasa a la etapa superior, llamada Etapa de Propulsión Criogénica Provisional.
El conector en forma de cono también ayuda a proteger el motor RL10 alojado en la etapa superior, que proporcionará la potencia necesaria para salir de la órbita de la Tierra y enviar la nave espacial Orion en su viaje a la Luna.
«El adaptador de la etapa del vehículo de lanzamiento que llegó al Centro Kennedy es significativo porque tenemos casi todas las piezas del cohete aquí a medida que nos acercamos al momenro de su lanzamiento», dijo Allison Mjoen, ingeniera de proyectos de operaciones con el programa Exploration Ground Systems. «Hemos pasado de la planificación a la implementación, y pronto el cohete comenzará a tomar forma con las operaciones de apilamiento», añadió.
Al llegar al muelle de la cuenca del complejo 39 de lanzamiento del Centro Kennedy, el LVSA viajó desde el Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la NASA en Huntsville, Alabama, a Florida en la barcaza Pegasus de la agencia, una embarcación de 95 metros de largo que se ha modificado para transportar la etapa de cohete más grande en el mundo: la etapa central de SLS.
Los técnicos descargaron el LVSA y lo transportaron al edificio de ensamblaje de vehículos, donde se almacenará hasta que sea necesario para incorporarlo al cohete. La etapa central, compuesta por el faldón delantero, el tanque de oxígeno líquido, el tanque de hidrógeno líquido y la sección del motor que contiene los cuatro motores RS-25 del cohete, es la pieza final del cohete que se entregará al Centro Kennedy antes del lanzamiento de Artemisa I.
Bajo el programa Artemisa, la Nasa está trabajando para llevar a la Luna a la primera mujer y al próximo hombre para 2024. Artemisa probará SLS y Orion como un sistema integrado antes de los vuelos tripulados y es la primera de una serie de misiones cada vez más complejas que permitirá la exploración humana a la Luna y Marte. SLS y Orion, junto con el Sistema de aterrizaje tripulado y el Gateway en órbita alrededor de la Luna, serán la columna vertebral de la exploración del espacio profundo de la agencia.