Los ingenieros de Intuitive Machines (IM) han seleccionado un área de Oceanus Procellarum, cerca del valle Schröter, el más grande de la Luna, para aterrizar su próxima misión lunar (IM-1) prevista para octubre de 2021.
Oceanus Procellarum, también llamado Océano de tormentas, cubre más del 10% de toda la Luna y tiene una gran variedad de características geológicas, aseguran desde la compañía en un comunicado.
La Nasa consideró esta zona para el aterrizaje del Apolo 18 y ahora, IM le toma el relevo para que el primer módulo de aterrizaje lunar desarrollado por una empresa privada, Nova-C, entregue una carga comercial y cinco cargas útiles proporcionadas por la Nasa en la superficie de la Luna. Estas cargas útiles llevan investigaciones científicas y tecnológicas que servirán para preparar el envío de los astronautas a la Luna en 2024.
El lugar elegido es plano, libre de grandes cráteres y rocas y tiene abundante luz solar durante todo el día lunar. “Este tipo de evaluación del aterrizaje lunar no se realizaba desde la misión Apolo de 1972”, dijo el presidente y CEO de IM, Steve Altemus.
“Nuestro equipo de Flight Dynamics realmente se superó a sí mismo al evaluar trayectorias y aterrizajes durante cada ventana de lanzamiento”, dijo el vicepresidente de Investigación y Desarrollo de IM, Tim Crain.