La empresa tecnológica GMV, en colaboración con la Agencia Espacial Europea (ESA), ha completado con éxito una campaña de pruebas en el marco del proyecto LUPIN (Enabling High-Performance PNT in the Lunar Environment), un sistema de navegación similar al GPS adaptado al entorno lunar. Esta iniciativa marca un salto cualitativo en la exploración automatizada de la Luna, ofreciendo a róveres y astronautas capacidades de posicionamiento en tiempo real similares a las que proporciona Google Maps en la Tierra.
Durante dos semanas, el municipio de La Oliva (Fuerteventura) sirvió como campo de ensayos para simular las futuras condiciones operativas del sistema. Las pruebas permitieron validar la precisión del sistema LUPIN y su capacidad para guiar un róver en distintos escenarios lumínicos y de velocidad.
El sistema LUPIN está diseñado para funcionar con las futuras señales del Lunar Communication Navigation System (LCNS), una red de satélites prevista en órbita lunar. Estas señales servirán como balizas de referencia para realizar tareas de navegación, sincronización temporal y localización —conocidas como funciones PNT— en regiones críticas como el polo sur lunar o la cara oculta.
Actualmente, los sistemas de navegación lunar enfrentan serias limitaciones. A falta de una red satelital, los róveres dependen de algoritmos internos y comunicaciones con la Tierra, lo que limita su autonomía y velocidad. LUPIN pretende superar estas barreras y dotar a los vehículos de superficie de navegación precisa y en tiempo real, reduciendo el consumo de recursos y acelerando las operaciones científicas o logísticas.
La campaña, dirigida por Steven Kay y Mariella Graziano desde GMV, ha generado más de siete kilómetros de datos reales en múltiples condiciones operativas. Se recrearon distintos entornos lunares, desde zonas bien iluminadas hasta pruebas en total oscuridad con iluminación a bordo, para comprobar el comportamiento del sistema.
Según Kay, el sistema ha respondido correctamente a velocidades de hasta un metro por segundo, lo que allana el camino hacia una movilidad más fluida y segura para las misiones lunares tripuladas del futuro. Para Graziano, “LUPIN representa nuestra voluntad de llevar la tecnología más allá de sus límites y convertir el futuro de la exploración espacial en una realidad tangible”.
Canarias, laboratorio lunar
El acto de presentación contó con autoridades locales como Isaí Blanco, alcalde de La Oliva, y Rayco León, consejero de Innovación del Cabildo de Fuerteventura, quienes destacaron la idoneidad de la isla como entorno de ensayo para tecnologías aeroespaciales y su papel creciente en la economía del conocimiento.
LUPIN se enmarca en el Programa de Innovación y Apoyo a la Navegación (NAVISP) de la ESA, que impulsa tecnologías clave para la exploración espacial. El sistema no solo servirá para la exploración autónoma y la cartografía lunar, sino que será fundamental en misiones tripuladas, donde la seguridad y eficiencia en el movimiento por la superficie lunar serán elementos críticos.
En paralelo a los avances en cartografía y navegación terrestre, esta iniciativa pone en marcha los cimientos de una infraestructura lunar de posicionamiento, imprescindible para consolidar una futura presencia humana sostenible en la Luna. Con LUPIN, la exploración lunar entra en una nueva fase de autonomía, precisión y eficiencia operacional.