Lockheed Martin Skunk Works y el Ministerio de Defensa de Dinamarca han completado con éxito una demostración en vuelo que subraya el potencial del F-35 como nodo central en operaciones multidominio (MDO). La prueba confirma la capacidad del caza de quinta generación para recopilar, procesar y compartir datos clasificados entre redes geográficamente dispersas.
El ejercicio, que forma parte de una serie de validaciones internacionales en curso, involucró aeronaves F-35 danesas operando desde Fort Worth (Texas, EE.UU.), que transmitieron información clasificada en tiempo real a través del sistema DAGGR-2, una pasarela de comunicaciones desarrollada por Skunk Works en colaboración con la Agencia de Defensa Antimisiles (MDA, por sus siglas en inglés).
Gracias a la conectividad por satélite comercial, los datos recopilados durante el vuelo se visualizaron en tiempo real en la Base Aérea de Skrydstrup, Dinamarca, permitiendo a las Fuerzas Armadas danesas evaluar directamente el rendimiento del sistema en un entorno operativo.
“Esta demostración representa un hito importante para reforzar nuestras capacidades”, explicó el jefe del Ejército del Aire danés, el general de división Jan Dam. “Nos permitió observar en directo cómo el F-35 puede actuar como una plataforma avanzada de recopilación y distribución de datos en redes multinacionales. La estrecha colaboración con Skunk Works ha sido clave para acelerar el despliegue de estas capacidades”.
Desde Lockheed Martin, OJ Sanchez, vicepresidente y director general de Skunk Works, recalcó el valor estratégico de la colaboración asegurando que “nuestra participación con el Ministerio de Defensa danés nos ha permitido desplegar capacidades reales a una velocidad sin precedentes en la industria. Esta prueba ratifica nuestro liderazgo en arquitectura abierta y la interoperabilidad entre plataformas, sensores y sistemas de armas, independientemente del fabricante”.
La clave de esta interoperabilidad reside en la arquitectura abierta de DAGGR-2, diseñada para conectar plataformas aéreas, sensores y nodos de mando de forma ágil y segura. Esta pasarela digital actúa como interfaz universal que permite integrar datos procedentes de múltiples fuentes y adaptarlos a diferentes entornos operativos y aliados.
En esta demostración, el sistema permitió que los F-35 funcionaran como sensores avanzados y relés de comunicaciones, multiplicando la eficacia de los sistemas de defensa integrados. La capacidad para compartir inteligencia táctica clasificada con rapidez proporciona una ventaja operativa significativa frente a amenazas emergentes y escenarios multidominio en evolución.
Colaboración internacional
Este ejercicio refuerza la colaboración entre Estados Unidos, Dinamarca y otros socios de la OTAN que operan el F-35 como plataforma común de superioridad aérea y conectividad táctica. La interoperabilidad es un objetivo estratégico compartido entre los países aliados, especialmente en el contexto de una defensa colectiva cada vez más digitalizada.
Lockheed Martin ha liderado varias iniciativas internacionales en torno a las operaciones multidominio, desarrollando soluciones modulares que permiten adaptar sus sistemas a los requisitos específicos de cada nación y misión.
Con este tipo de demostraciones, Lockheed Martin avanza hacia un modelo de defensa basado en redes de plataformas autónomas y tripuladas, integradas en tiempo real. El F-35, con sus capacidades de fusión de sensores, guerra electrónica y conectividad táctica, se consolida como pilar fundamental de esta doctrina operativa.
Dinamarca, que forma parte del programa internacional F-35 desde su fase temprana, refuerza con esta validación su posición como país con capacidades avanzadas dentro del marco OTAN. El éxito de la demostración abre la puerta a la incorporación de sistemas similares en otros ejércitos europeos que buscan mejorar su integración digital.