El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha adjudicado a las empresas Blue Origin, SpaceX y United Launch Alliance (ULA) un contrato de 5.600 millones de dólares para servicios de lanzamientos espaciales.
El contrato incluye un período de pedido de cinco años, que se extenderá hasta junio de 2029, con opción a un período de pedido adicional de cinco años. Esta adjudicación es el resultado de un concurso al que se presentaron siete ofertas.
La selección de estas empresas por parte del Departamento de Defensa subraya la creciente colaboración entre el gobierno y las empresas espaciales privadas para salvaguardar los intereses nacionales en el espacio. Se espera que las empresas elegidas cumplan los requisitos del Pentágono en materia de acceso fiable y seguro a la órbita para cargas útiles de seguridad nacional.
El Departamento de Defensa también anunció contratos con BAE Systems para el desarrollo, la integración, la evaluación y la demostración de la seguridad cibernética, la arquitectura de sistemas abiertos, nuevas tecnologías de aviónica y sensores, y tecnologías multidominio centradas en la parte de la aviónica de la guerra eléctrica, y con Raytheon para evaluar la utilidad militar y operativa y la viabilidad técnica de una capacidad única de sistema de sistemas.