Los ministros de la Unión Europea han llegado a un acuerdo para coordinar la movilidad de los viajeros, que aportará más claridad y previsibilidad a las medidas de restricción de la libre circulación causadas por la pandemia del coronavirus.
El acuerdo permitirá poner orden en una situación actualmente confusa. “La convergencia de los Estados miembros envía un mensaje contundente a los ciudadanos y ofrece un claro ejemplo de que la UE actúa allí donde su intervención es imprescindible. Hemos extraído las enseñanzas oportunas: no superaremos la crisis cerrando unilateralmente las fronteras, sino trabajando juntos”, asegura la Comisión Europea.
Además, desde Bruselas se indica que es necesario un enfoque bien coordinado, predecible y transparente sobre la adopción de restricciones a la libertad de circulación, a fin de evitar la propagación del virus, salvaguardar la salud de los ciudadanos y mantener la libre circulación dentro de la Unión en condiciones seguras. “Se trata de una cuestión importante para los millones de ciudadanos que dependen en su día a día de los desplazamientos transfronterizos, y crucial para nuestros esfuerzos por empezar a reconstruir con seguridad la economía”, comentan desde la UE.
Así, se publicará un mapa, con códigos de colores basados en criterios comunes, elaborado por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades. Conocido como sistema semáforo, clasificará las regiones europeas en zonas verdes, naranjas y rojas según la gravedad de los brotes de coronavirus, aunque seguirán siendo los Estados miembros quienes decidan qué tipo de medidas aplican a los viajeros que entren en sus territorios.
En función de este mapa, los Estados miembros decidirán si aplican determinadas restricciones, tales como cuarentena o pruebas de diagnóstico, a los viajeros procedentes de otras zonas. Los Estados miembros han acordado que no habrá restricciones, como cuarentena o pruebas de diagnóstico para los viajeros procedentes de las regiones de color verde. Cuando viajen desde regiones de color naranja o rojo, los viajeros deben prever la imposición de medidas restrictivas. De conformidad con la Recomendación, los Estados miembros deben distinguir entre zonas de color naranja y rojo.
El mapa también facilitará a los viajeros información general sobre el nivel de riesgo en su destino. Junto con la información disponible en la plataforma web Re-open EU, ello permitirá a los viajeros saber si se les van a aplicar determinadas medidas si viajan a otra región de la UE.
La recomendación se aplica a todos los Estados miembros de la UE, incluido el Reino Unido durante el período transitorio. El mapa abarcará también Islandia, Liechtenstein y Noruega.