El impacto de la crisis de Covid-19 en los principales programas y proyectos de la Nasa podrían ascender a los 3.000 millones de dólares, según un informe de auditoría de la Oficina del Inspector General (OIG) de la agencia, publicado el pasado 31 de marzo.
El informe de la OIG presenta un resumen de los impactos relacionados con los principales programas y proyectos de la Nasa al final del año fiscal 2020 y, según el cual, 56 de ellos se vieron directamente afectados, “incluidos 30 de los principales que se vieron afectados con un impacto estimado de aproximadamente 1.600 millones de dólares del total de los 3.000 millones de dólares”, como avanza el informe en su introducción.
“En esta revisión, encontramos que varios programas y proyectos importantes se han visto afectados debido a deslices cotidianos en las compilaciones de hardware, que han creado ineficiencias y programas prolongados, lo que ha resultado en aumentos de costes. Por ejemplo, la fecha de preparación para el lanzamiento del Telescopio Espacial Romano se retrasará seis meses debido a retrasos en el montaje y entrega del hardware por parte de los subcontratistas”, señala el informe.
“Otros proyectos experimentaron retrasos debido al acceso limitado o la falta de acceso a las instalaciones de la Nasa. Por ejemplo, los técnicos del programa SLS informaron de un impacto de coste total estimado de Covid-19 de más de 360 millones de dólares debido a ajustes de programación y cierre de las instalaciones”.
Además, los socios de la Nasa se han visto afectados, contribuyendo a retrasos en las entregas de proyectos y culminación de ensamblajes de equipos. Por ejemplo, los socios nacionales e internacionales de NISAR experimentaron retrasos de dos semanas a cuatro meses.
“El impacto evolutivo de Covid-19 requiere que los gerentes de la Nasa actualicen continuamente los costes estimados de los programas y proyectos. Por ejemplo, en enero de 2021, los técnicos del programa SLS actualizaron su impacto en los costes del año fiscal 2020 con una estimación de ocho millones de dólares a 103,4 millones de dólares”, añade la OIG.
“Además, en diciembre de 2020, los técnicos del proyecto SPHEREx actualizaron su estimación del impacto en 8.2 millones de dólares. Debido a las continuas incertidumbres en torno a la pandemia de Covid-19, es probable que la Nasa continúe experimentando impactos en sus principales programas y proyectos”, apunta el informe.
Varias misiones de observación de la Tierra también se han visto afectadas, así como el desarrollo del telescopio James-Webb. El programa espacial tripulado estadounidense también se ve perjudicado y, en particular, los elementos de las futuras misiones lunares Artemisa, según concluye la OIG.