Madrid.- Ya son ocho las sentencias firmes por las que diversos Juzgados de lo Social han revocado las sanciones impuestas durante el año 2010 por Aena a varios controladores de Santiago de Compostela, según la Unión Sindical de Cotroladores Aéreos (Usca).
Dicho sindicato denuncia que algunos de los directivos de Aena que hace dos años protagonizaron los hechos juzgados e impusieron las sanciones ahora revocadas continúan ocupando los mismos cargos en dicha empresa pública -o incluso con más altas responsabilidades- a pesar de que los tribunales ya han dictado sentencias contrarias a su gestión, por lo que, a juicio de Usca, “tendría que replantearse la continuidad de esos directivos”.
Para hoy y mañana está previsto que declaren en el Juzgado de Instrucción número 2 de Fontiñas, en Santiago de Compostela, 8 imputados relacionados con esta causa “por un delito aún sin determinar”, añade el mencionado sindicato.
Tal como recoge una de esas sentencias a las que ha tenido acceso este diario, “no puede obligarse a un controlador aéreo a atender dos posiciones de control incompatibles de manera simultánea, ya que va en contra de lo recogido en el Reglamento de la Circulación Aérea”.
A decir de Usca, “responsables de Aena obligaron en 2010 a los controladores a trabajar de manera ilegal para paliar la falta de horas. Un mismo trabajador debía atender el control de la torre y de aproximación, dos posiciones de control incompatibles de manera simultánea, mermando la calidad del servicio y las condiciones de seguridad”.
“Más allá de que el documento de configuración de capacidades del Centro de Santiago de Compostela así lo admitiera, es claro que el mismo se halla en todo caso supeditado al Reglamento de Navegación Aérea y éste, en contra de lo pretendido por la Abogacía del Estado, no contempla la obligación de prestar el servicio de control de aeródromo conjuntamente con el de aproximación y ruta desde una única posición de control”, según la sentencia del Juzgado de lo Social número 1 de Santiago de Compostela del pasado 31 de julio.
Usca asegura que “a pesar de que los controladores denunciaron reiteradamente estos hechos ante la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), responsables de Aena en 2010 coaccionaron con amenazas de sanciones y despidos a los controladores. éstos, a su vez, se enfrentaban de manera individual a responsabilidades penales en caso de accidente o incidente grave si cedían al chantaje de trabajar en las mencionadas configuraciones ilegales.
El motivo por el que obligaron a un mismo controlador a operar dos posiciones estaba provocado porque la mayoría de los controladores estaban a punto de superar legalmente la jornada máxima permitida. Y si ese hecho se hubiera producido Aena no tenía capacidad para abrir los aeropuertos gallegos, como así sucedió en días posteriores”.
En las citadas sentencias firmes se considera que “con relación al aeropuerto de Santiago en aquel momento, las instrucciones recibidas relativas a la concentración en un solo trabajador de las tareas de control de torre y de aproximación eran, cuando menos, de dudoso encaje legal”.
Asimismo, establece que “a la vista de las consecuencias que su observancia tendría para la seguridad aérea y la propia responsabilidad del trabajador y Aena por el riesgo que pudiera ello generar, en ningún caso la negativa a seguir tales mandatos por parte del actor puede considerarse que tenga encaje en el tipo disciplinario aplicado en este caso, lo que conlleva la revocación de la sanción impuesta, con estimación de la demanda”.