Madrid.- En medio de una crisis económica tan fuerte como la que padecemos en España y con casi 5 millones de parados, con una empresa como Aena tan fuertemente endeudada, los ingresos medios de los controladores aéreos españoles en 2009 fueron de 323.000 euros, más del doble que los de los controladores alemanes y casi el triple que los de los británicos, según explicó ayer el ministro de Fomento en el Congreso.
Conforme a los datos alegados por José Blanco, “todos aquellos privilegios que habían conseguido mediante sus amenazas latentes y explícitas, establecidas en el Estatuto de los Controladores Aéreos de 1992, se consagraron en el Primer Convenio Colectivo Profesional entre Aena y los Controladores, que entró en vigor el 1 de enero de 1999. Estos acuerdos llegaron a producir que algún controlador de la Torre de Barajas, llegase a realizar 1.200 horas extraordinarias en 2008, lo que le supuso una retribución total de casi 1 millón de euros. Y en ese mismo año más de un representante del Usca superó la retribución de 600.000 euros. Esto es lo que la sentencia de la Audiencia Nacional, que luego comentaré, llamó utilización de la negociación colectiva en fraude de ley, no constituyendo un estado de normalidad, sino un estado de excepción permanente”, dijo el titular de Fomento.
“Si hubiésemos aceptado la última oferta del Usca -añadió el ministro-, en 2012 los costes de navegación serían un 70% más elevados que en los mayores países europeos y el coste de prestar el servicio se elevaría a 1.100 millones de euros en 2014, casi el doble de lo que costaba en aquel momento. En esa misma oferta del Usca, pretendían que las retribuciones de aquellos controladores que pasasen a situación de inactividad a los 52 años, acogiéndose a la LER (licencia especial retribuida) cobrasen 170.000 euros no ya hasta los 65 años, sino durante toda su vida. Es decir, se pretendía que siguiesen cobrando 170.000 euros al año de forma vitalicia, sin trabajar”.
“Solo un dato les servirá, señorías, para hacerse una idea de lo que estamos hablando: en el año 2008, los controladores aéreos realizaron 1 millón 369 mil horas extraordinarias, que tuvieron un coste de 360 millones de euros y en lo que va de año, con la reforma, los controladores han realizado poco más de 18.000 mil horas extraordinarias con un coste de 2,5 millones de euros. Es decir, hemos pasado de gastarnos 360 millones de euros en horas extras, a gastar menos de 3 millones de euros”, agregó Blanco.
“España tiene uno de los ratios de operación/controlador más bajos entre los países de nuestro entorno, siendo, en 2008, un 46% inferior a Alemania, un 16% inferior a Francia, un 50% inferior al ratio del Reino Unido y un 31% inferior al ratio de Italia. En esta misma línea, y para que sirva de ejemplo, en el año 2010, el ratio de operaciones por controlador era de 708, mientras que en el año 2000 era de 792 operaciones por controlador”.
El pasado mes de agosto, Aena y los controladores firmaron un acuerdo, en virtud del cual
1) Se garantiza una retribución media de 200.000 euros anuales para controladores con antigüedad anterior al 5 de febrero, lo que supondrá en su conjunto una masa salarial de 480 millones de euros en el 2010. Para el período de 2011-2013 se garantiza una media salarial por controlador operativo¡ de 200.000 euros.
2) En ese acuerdo también se acepta la jornada anual máxima con referencia a la Ley 9/2010, que son 1.670 horas de actividad aeronáutica y las 80 horas extraordinarias anuales, de acuerdo a lo establecido en el Real Decreto de agosto. Además, la jornada programable se flexibiliza de acuerdo a la carga de trabajo de cada dependencia y se establece el descanso (25% del tiempo en el turno de día y 33% del tiempo en el turno de noche).
3) Además, se acuerda abonar con cargo a la masa salarial del 2010 las cantidades de la acción social.
4) Y se acuerda la creación de los grupos de trabajo participativos, y una auditoria de Eurocontrol sobre las capacidades de sectores y posiciones de control. Por último, Aena y Usca convienen el propósito conjunto de concluir la negociación del Convenio antes del 31 de diciembre de este año.
“Quiero resaltar que en ese mismo acuerdo de agosto, el Usca se comprometió a mantener durante todo el proceso un clima de normalidad operativa. Un compromiso que, como todos sabemos, apenas dos meses después, comenzaron a cuestionar e incumplir.”, dijo el ministro.
A las 7 de la tarde del pasado día 3, ya cerrado el espacio aéreo español y en medio de la grave situación de los aeropuertos, el secretario de Estado de Transportes mantuvo una reunión con los representantes de Usca. En ésta, según el ministro, los representantes de los controladores presentaron una propuesta de Convenio Colectivo, con el que pretendían recuperar los privilegios de los que disfrutaban antes de la Ley 9/2010. Entre las propuestas cabe destacar: considerar el Primer Convenio (1999) como referencia permanente, orillando la Ley 9/2010, aprobada por el Parlamento, que es el marco jurídico vigente; dejar sin vigencia las normas en materia de organización del trabajo, turnos, horarios, vacaciones, servicios y cualesquiera otras relacionadas con el ámbito operacional emanadas de Aena; un compromiso económico inaplicable, debido a los incrementos retributivos propuestos; y una reducción de la jornada laboral”.
“Si firmáis este Convenio se termina todo”. Eso es lo que le dijeron al Secretario de Estado, cuando tenían bloqueados a más de 200.000 pasajeros en nuestros aeropuertos. La respuesta del secretario de Estado fue muy clara, ante la gravedad de los hechos que se estaban produciendo, solo cabía que los controladores volviesen a su puesto de trabajo y depusieran su chantaje.