Washington.-El presidente norteamericano Barack Obama compareció el viernes por la noche ante las cámaras de televisión para confirmar la existencia de explosivos en unos paquetes transportados en aviones de carga desde Yemen a Estados Unidos.
Obama dijo que los paquetes sospechosos hallados en dos aviones de las compañías de transporte de paquetes UPS y Fedex en vuelo hacia EEUU contenían explosivos dirigidos a centros religiosos judíos en la ciudad estadounidense de Chicago. Ambos paquetes se enviaron desde Yemen.
El presidente norteamericano reveló también que su asesor en la lucha antiterrorista, John Brennan, estaba en contacto con el presidente yemení, Alí Abdulá Saleh, quien confirmó que otro paquete sospechoso encontrado en un avión de pasajeros de la compañía Emirates, procedente de Yemen y con destino a Nueva York, «contenía un dispositivo explosivo». Dicha aeronave fue escoltada por cazas canadienses y norteamericanos hasta su aterrizaje en el aeropuerto internacional JFK.
Una alerta de seguridad está en marcha en los aeropuertos del Reino Unido y EE UU. La policía investigó el contenido de paquetes detectados en el aeropuerto de East Midlands, en el centro oeste de Inglaterra. A su vez, en EE UU se inspeccionan aviones de carga en aeropuertos de las ciudades de Filadelfia y Newark, Nueva Jersey.
Las autoridades de EE.UU fueron alertadas tras hallar en Gran Bretaña un paquete sospechoso a bordo de un avión de carga que hizo escala en su vuelo de Yemen a Estados Unidos. Al parecer, se trataba de un cartucho de tóner de impresoa que habría sido manipulado.
La agencia federal norteamericana de seguridad aeroportuaria (TSA) indicó que, como medida de precaución, los aviones en los que se detectaron los paquetes sospechosos en los aeropuertos de Newark y Filadelfia habían sido trasladados a lugares alejados donde se efectuaba la inspección de los mismos.
Otro comunicado del Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos señaló que se adoptarán nuevas medidas para mejorar la seguridad aérea. «Algunas de esas medidas serán visibles, otras no», advirtió la agencia.
Los servicios de Inteligencia habían sido informados el pasado jueves por aliados norteamericanos de la existencia de un complot terrorista para atentar contra EE UU. Como medida de precaución, dos aviones de carga de UPS fueron inspeccionados en el aeropuerto de Filadelfia y otro más en el aeródromo de Newark, en Nueva Jersey, así como un camión en la ciudad de Nueva York.
Los primeros indicios apuntan a que se trata de una acción organizada por la red terrorista Al Qaeda, que sigue planeando perpetrar ataques en suelo estadounidense, indicó Obama. «Fortaleceremos la cooperación con Yemen para extirpar a Al Qaeda de la Península Arábiga y destruir a sus activistas, así como lograr un Yemen más próspero. Las últimas 24 horas ponen de relieve la necesidad de permanecer vigilantes”, explicó el presidente norteamericano, quien aseguró que EE UU mantendrá su vigilancia y su coordinación con los aliados para «garantizar nuestra seguridad. No vacilaremos en nuestra decisión».