Hamburgo.- Las autoridades aeronáuticas alemanas han implantado por vez primera en el aeropuerto de Hamburgo dos escáneres corporales que ya han adoptado países como EE UU o el Reino Unido para fortalecer las medidas de seguridad y prevenir atentados.
Con carácter provisional y a modo de prueba por seis meses, han comenzado a funcionar estos equipos cuyo software proyecta una figura estilizada en lugar de la imagen corporal real y al mismo tiempo permite detectar objetos prohibidos como armas y explosivos.
La propuesta de la Comisión de la Unión Europea de incluir el uso de escáneres en la normativa europea de seguridad fue dejada en suspenso ante las reservas del Parlamento Europeo, que pidió un estudio más profundo de los efectos de la radiación de los escáneres en la salud de los pasajeros.
En el aeropuerto de Hamburgo, los pasajeros tienen la posibilidad de pasar por el nuevo escáner o someterse a los controles del personal de seguridad.
«Hemos procurado que estas máquinas cumplan los tres requisitos que siempre exigimos: que no constituyan un riesgo para la salud, que se preserven los derechos de privacidad y que aumente la seguridad en el transporte aéreo», señaló el ministro alemán del Interior, Thomas de Mazière, al inaugurar las nuevas máquinas.