Madrid.- Una docena de aeropuertos, con menos de cincuenta operaciones diarias, contarán con un sistema automatizado de control aéreo que sustituirá a los controladores, que serán redistribuidos entre los centros de mayor número de operaciones, lo que conllevará una reducción de las tasas de navegación, anunció ayer el ministro de Fomento, José Blanco ante el Congreso de los Diputados.
Durante su comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso, Blanco explicó que la implantación del sistema automatizado de control aéreo se hará en los aeropuertos con menos de cincuenta operaciones diarias, en los que se instalará el sistema Afis, que permite que un avión despegue o aterrice sin ayuda directa de un controlador, aunque la aeronave deberá recibir previamente las informaciones básicas sobre el estado de la pista. Este sistema, previsto por la OACI, funciona ya en muchos aeropuertos de los Estados Unidos.
El ministro afirmó que el SACTA (Sistema Automatizado para el Control del Tráfico Aéreo) ha alcanzado un alto nivel de calidad y que uno de cada tres vuelos en el continente europeo son controlados por sistemas tecnológicos desarrollados por empresas españolas.
La medida tiene por objeto reducir los costes de navegación aérea en un 75%, lo que tendrá «una clara repercusión en el precio de los billetes», señaló el ministro. Estos costes, añadió, generan un déficit anual de 300 millones de euros, que Blanco atribuye, entre otras razones, a los elevados sueldos de los controladores. El titular de Fomento apeló, no obstante, a la responsabilidad de los controladores aéreos como profesionales y ciudadanos para alcanzar en breve un acuerdo que permita dar un mejor servicio a los pasajeros de forma sostenible y viable.
Para el titular de Fomento, el elevado coste de la navegación aérea en España se debe a la baja productividad y a la limitada capacidad aérea de Aena para mejorar «el deficiente sistema de organización de trabajo».
Esta situación, explicó, obliga a compensar las altas tasas de navegación aérea con el establecimiento de tasas aeroportuarias muy por debajo de la media europea, lo que a su juicio «genera un déficit de explotación que debemos abordar cuanto antes».