Hawai.- El presidente norteamericano Barack Obama reconoció ayer que “hubo un claro error humano y sistémico” en relación al intento de hacer explotar un avión que se dirigía a Detroit el día de Navidad con casi 300 pasajeros a bordo.
Obama calificó de «totalmente inaceptable» tal error y prometió buscar «responsabilidades» entre la comunidad de inteligencia y seguridad. «Hubo una mezcla de errores humanos y sistémicos que contribuyeron a esta potencialmente catastrófica brecha de seguridad», dijo Obama en una alocución radiada desde Hawaii, donde pasa sus vacaciones navideñas.
«Tenemos que aprender de este episodio y actuar rápidamente para arreglar los fallos en nuestro sistema, porque nuestra seguridad y vidas están en juego”, agregó.
El presidente subrayó que cuando el Gobierno tiene información sobre un extremista identificado y esa información no se comparte y no se actúa como se debería, y ese extremista se sube a un avión con explosivos peligrosos, ha ocurrido un error sistémico.
En su segunda comparecencia ante los medios informativos en Hawai, donde pasa sus vacaciones navideñas, Obama reconoció que las deficiencias en el sistema impidieron que las advertencias que realizó a las agencias de inteligencia el padre del joven nigeriano Omar Farouk Abdulmutallab fueran procesadas correctamente.