Washington.- A raíz del frustrado atentado terrorista del pasado viernes en un vuelo de Northwest Airlines, reivindicado desde el Yemen por Al Qaeda, las autoridades norteamericanas han impuesto nuevas restricciones a los viajeros que podrían alargar las esperas en los aeropuertos y limitar la capacidad de los viajeros procedentes de vuelos internacionales para moverse por el avión y utilizar cualquier tipo de aparato electrónico.
Los pasajeros sólo podrán llevar un bulto de mano en la cabina, no se podrán utilizar aparatos electrónicos dentro del avión y durante la última hora de vuelo los pasajeros no podrán levantarse de sus asientos.
La Administración estadounidenses no ha querido confirmar las nuevas restricciones que adoptará. Ni la agencia federal de seguridad de transportes (TSA) ni la propia directora de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, han querido ser específicos sobre los cambios aunque sí han avisado a los pasajeros de que cada aeropuerto tomará sus propias decisiones.
«Las nuevas medidas van a ser impredecibles, por lo que los pasajeros no deben esperar ver lo mismo en todas partes», dijo Napolitano. Según ésta, «los viajeros deben continuar con sus planes de vacaciones» y «estar atentos y alerta» para avisar de cualquier «comportamiento sospechoso» a los funcionarios pertinentes.
Numerosos medios estadounidenses y compañías aéreas ya han confirmado estas medidas a falta del anuncio oficial del gobierno federal. La británica British Airways ha avisado a sus usuarios, a través de su página web, que en los vuelos con destino a EE UU los pasajeros solo podrán subir un bulto a la cabina. Air Canada, por su parte, ya ha anunciado a sus pasajeros que «durante la última hora no estará permitido levantarse de los asientos ni acceder a su equipaje».