La sonda Messenger revela nuevos datos del planeta Mercurio 6/05/09 Washington.- Los análisis de los datos recogidos por la sonda espacial Messenger de la Nasa durante su segundo sobrevuelo a Mercurio realizado el pasado mes de octubre revelan que la atmósfera, la magnetosfera y el pasado geológico del planeta se caracterizan por tener unos niveles de actividad mucho más elevados de lo que los científicos creían.
El pasado 6 de octubre la sonda sobrevoló Mercurio por segunda vez, capturando más de 1.200 imágenes en color y de alta resolución del planeta, revelando otro 30% de la superficie de Mercurio que nunca antes había sido observada por una nave espacial, y recogiendo datos esenciales para planear el resto de la misión. "El segundo sobrevuelo de Messenger proporcionó un gran número de nuevos descubrimientos," dijo Sean Solomon, principal investigador de la misión en la Institución Carnegie de Washington. Una de las mayores sorpresas ha sido cómo han cambiado tan drásticamente las dinámicas magnetosféricas desde que fueron observadas durante el primer sobrevuelo de Mercurio en Enero de 2008. La actividad atmosférica es mayor de lo que los científicos pensaban. En esa actividad, existe una interacción entre esa atmósfera y el campo magnético del planeta. Otra ha sido el descubrimiento de un enorme e inusual cuenca de impacto bien conservada que fue el centro de una concentrada actividad volcánica. Este inmenso cráter tiene un diámetro aproximado de 700 Kilómetros. Los científicos creen que esta cuenca, llamada Rembrandt, fue provocada por el impacto, probablemente de un asteroide, durante un intenso bombardeo proveniente de las entrañas del Sistema Solar, hace unos 3.900 millones de años. Otro de los descubrimientos de Messenger ha sido la primera detección de magnesio en la exosfera de Mercurio. Según los científicos, ya existían indicios de ese elemento en la atmósfera del planeta, pero no se sabía que pudiera ser un componente importante de los materiales de su superficie. Hace un año, la mitad de Mercurio era desconocida. Con las imágenes y los datos recogidos por la sonda espacial Messenger, los científicos ahora ya conocen el 90% de la superficie del planeta en alta resolución, y pueden comenzar a evaluar lo que esta imagen global podrá decirnos sobre la historia y la evolución del planeta.