Madrid.- El satélite Nanosat 1B, diseñado y desarrollado por el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), lleva una batería de litio-Ión de Grupo Saft, proveedor principal de aplicaciones energéticas para el sector aeroespacial en todo el mundo, que le aporta una alta capacidad y densidad de potencia.
Nanosat 1B es una nueva misión espacial fruto del programa marco de Pequeños Satélites liderado por el INTA, con el objetivo de promover nuevas actividades de I+D en el campo de las nano y microtecnologías, y el uso de componentes comerciales para el espacio. El programa Nanosat, en el que se inscribe concretamente este proyecto, contempla el desarrollo de sucesivos lanzamientos con aplicaciones específicas, ya que las pequeñas plataformas como la del Nanosat 1B se prestan para misiones de demostración en órbita de instrumentos, componentes y tecnologías de apoyo a programas de más envergadura, o misiones científicas de observación de la atmósfera y de la tierra.
La batería de litio instalada es la primera de estas características que se monta en un satélite de fabricación europea. De esta forma, Saft Baterías S.L., filial española de la multinacional Saft, comienza su andadura dentro del sector espacial en España, del que es líder a nivel internacional gracias a sus baterías de li-ión.
La batería adquirida por el INTA consta de dos módulos iguales por motivos de redundancia, compuesto cada uno por seis elementos en serie de la celda de li-ion MPS176065. Se trata de un acumulador que proviene del sector industrial donde ha demostrado su fiabilidad tras más de 3 millones de elementos puestos en el mercado.