Madrid.- El Colegio oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC) ha solicitado a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) que ponga en marcha un control sistemático de inspecciones SAFA -las dirigidas a aeronaves extranjeras- de todos los vuelos de Ryanair que salgan y aterricen en aeropuertos españoles para verificar si sus niveles de combustible cumplen con la normativa vigente.
La aerolínea irlandesa de bajo coste ha rechazado las acusaciones del Copac confirmando que “todos sus pilotos obedecen totalmente las regulaciones mínimas de combustible de Ryanair que son aprobadas tanto por la Autoridad de Aviación Irlandesa como por la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA)”. Ryanair también ha rechazado las acusaciones del Copac sobre una presunta demanda de un aterrizaje de prioridad y/o una desviación de un avión en octubre. Según la compañía, la investigación interna ha confirmado que ningún aterrizaje de prioridad y/o desviación ocurrió en este mes.
La solicitud de COPAC se hace “tras tener conocimiento de varios casos en los que vuelos de Ryanair han solicitado permiso para aterrizar con prioridad frente a otros por ir cortos de combustible, pero sin llegar a declarar emergencia, de manera que ninguna investigación posterior comprueba la veracidad de los hechos. De esta manera, se da prioridad a los vuelos de Ryanair en las maniobras de aproximación y aterrizaje, lo que provoca incidencias en los vuelos de otras compañías envueltas en la misma secuencia de operación, lo que les supone un sobrecoste y una reducción de sus propias reservas de combustible ante una potencial emergencia.
Para el COPAC es preciso que AESA, dentro de su ámbito de competencias con aerolíneas extranjeras operando en España, investigue estos hechos y compruebe qué política de combustible aplica Ryanair.