Buenos Aires.- Norwegian Air Argentina, del grupo Norwegian, inaugura sus operaciones de cabotaje en el país, con un vuelo que despegó desde el Aeroparque Jorge Newbery, en la Ciudad de Buenos Aires, y aterrizó en Córdoba, en el Aeropuerto Internacional Ingeniero Ambrosio Taravella.
El vuelo, identificado como DN6022, fue tripulado por el CEO local de la aerolínea, el capitán Ole Christian Melhus y Edgar Boese, a bordo de un Boeing 737-800, con matrícula LV-HQH, de un año y medio de edad.
El avión lleva la imagen del notable artista argentino Astor Piazzolla que ilustra la cola del avión. Se trata de una tradición del grupo Norwegian en el mundo, que rinde tributo a personalidades locales que hayan contribuido e inspirado a la sociedad con su obra.
Para finales de este año, Norwegian Air Argentina contará con una flota de cuatro aeronaves, con la que operará seis rutas que conectarán Buenos Aires con Córdoba, Mendoza, Iguazú, Neuquén, Bariloche y Salta, cuyos pasajes se hallan a la venta desde el 4 de septiembre pasado. En esta primera etapa, todas las operaciones en Buenos Aires se realizarán en el Aeroparque Jorge Newbery.
El ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, participó en el acto de celebración por el inicio de las operaciones de Norwegian Air Argentina, junto al secretario de Turismo Gustavo Santos -quien viajaba de regreso de Córdoba- y los directivos locales de aerolínea de origen noruego.
“Es un verdadero honor ser parte de este magnífico proyecto de Norwegian en Argentina, que contribuirá a aumentar la conectividad, estimular el turismo y a crear miles de puestos de empleos en este país. Desde hoy y por muchos años, veremos los aviones de Norwegian con su trompa roja volando los hermosos cielos argentinos”, expresó Melhus.
Por su parte, Dietrich afirmó que “es un día histórico para la Revolución de los Aviones. Se suma a nuestro transporte aéreo una de las aerolíneas más grandes del mundo que vino a invertir y a dar empleo, que decidió apostar por nosotros. Confió en nuestros pilotos, tripulantes de cabina y mecánicos. Eligió conectar nuestras ciudades. Confió en los argentinos. Y desde hoy muchas más personas van a poder volar; el avión dejó de ser sinónimo de privilegio.