Moscú.- Un Tupolev-142, de la flota rusa del Pacífico, con 11 militares a bordo, se estrelló el pasado viernes curante un vuelo de entrenamiento sobre el estrecho de Tartaria que separa la costa continental de Rusia de la isla de Sajalín, según informó un portavoz del Ministerio ruso de Defensa.
Rusia figura entre los países que registran un mayor número de accidentes aéreos. El más reciente, el pasado día 1 en Yakutia, Liberia, once personas murieron al estrellarse un avión del Ministerio del Interior ruso.
Varios barcos y aviones participan en las labores de búsqueda, aunque a tenor de las circunstancias del siniestro hay pocas esperanzas de encontrar supervivientes. Durante la operación de rescate, en la que participan buques de la Flota del Pacífico, embarcaciones civiles y aviones de la Fuerza Aérea de Rusia, fue hallado el lugar de la caída. Los socorristas se encargan de buscar a los tripulantes del avión.
El Tupolev-142 cayó a unos 15-20 kilómetros de la costa, cerca del cabo Sading. Los sonares detectaron la presencia de supuestos fragmentos de la aeronave al norte de la bahía de Silantiev, a una profundidad de 44 metros.
El Tupolev-142M3 es un avión antisubmarino desarrollado en los años 60 del siglo pasado. Su tripulación consta de 10 personas. La velocidad es de hasta 825 Km/h; y su envergadura, de 51,1 metros.