Madrid.- El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) demandará ante la Audiencia nacional a la compañía irlandesa de bajo coste Ryanair por irregularidad en los contratos de los pilotos que tienen base en España para que los regularice y los ajuste a la legislación laboral y fiscal española, según anuncia el sindicato.
“La compañía irlandesa no ha dado ni un paso en firme para hacer efectivo el reconocimiento de Sepla como representante de los pilotos”, denuncia éste quien explica su versión sobre la ruptura en las conversaciones entre Sepla y Ryanair tras la reunión mantenida el pasado 15 de enero entre ambas partes.
Dicha reunión, la única mantenida hasta la fecha, se concertó con el fin de concretar el reconocimiento de Sepla como representante de los pilotos de Ryanair en España, tal y como se había comprometido a hacer la aerolínea en diciembre. Sin embargo, durante el trascurso de la reunión Ryanair se centró en ofrecer una subida salarial a los pilotos, siempre y cuando Sepla aceptara reconocer el sistema de representación impuesto por la aerolínea en cada una de sus bases.
Según el sindicato español, dicho sistema de representación, que la compañía lleva años imponiendo en España consiste en una designación unilateral por parte de la aerolínea de un representante de los pilotos en cada una de las bases de Ryanair en España. Así, es un piloto elegido por la empresa quien negocia las condiciones de sus compañeros. Sepla considera que esta fórmula es una flagrante violación de la libertad sindical, ya que dicho negociador no ha sido elegido por los trabajadores a los que supuestamente representa. De ahí la negativa de Sepla a aceptar este sistema como condición para la subida salarial de sus pilotos.
A pesar de ello, Sepla sí accedió a someter a votación la oferta salarial de Ryanair, al considerar imprescindible conocer la opinión del colectivo. Para ello, la compañía se ofreció a entregar el censo de sus pilotos a Sepla, algo que tampoco ha hecho hasta la fecha. “Resulta curioso que Ryanair nos acuse de no querer hacer la votación mientras nos impide tener los datos para llevarla a cabo” lamentan desde la Sección Sindical de Sepla en Ryanair.
Según el Sepla, las trabas puestas por Ryanair para reconocer a la sección sindical de Sepla y comenzar una negociación colectiva afectan también a cerca de la mitad de la plantilla de pilotos, los denominados “contractors”. Estos pilotos son empleados que trabajan indirectamente como autónomos para la compañía. Para ello, han tenido que constituir una microempresa con otros pilotos, que es subcontratada por un bróker al que, a su vez, contrata Ryanair como proveedor de pilotos.
Estos “contractor”, que a todos los efectos trabajan para Ryanair, no son reconocidos por la compañía ni como empleados de la misma ni como miembros de la representación sindical de Sepla, algo inasumible para el sindicato. El reconocimiento de estos trabajadores como empleados de Ryanair es condición sine qua non para que Sepla inicie una negociación con la compañía. “No vamos a dejar fuera de la negociación a la mitad de nuestros compañeros”, señalan desde la sección sindical. “Ryanair creó esta figura para tratar de diluir su responsabilidad como empleador de estos pilotos y ahora la aprovecha para no asumir sus obligaciones con ellos. No lo vamos a consentir".
Sepla confirma que demandará a Ryanair ante la Audiencia Nacional por irregularidad en los contratos de los pilotos que tienen base en España, tanto los contratados directamente por la compañía como los contractors. El fin último del reconocimiento sindical era iniciar una negociación colectiva que finalizase en la firma de un convenio colectivo y la regularización de los contratos de los pilotos de Ryanair en España. La negativa de Ryanair a reconocer a Sepla fuerza el uso de la vía judicial para conseguir que los pilotos de Ryanair en España tengan un contrato directo con la compañía amparado en la legislación laboral española.
Sepla recuerda a Ryanair que la aceptación de los sindicatos y la garantía de unas buenas condiciones laborales no están reñidas con la buena gestión en una compañía de bajo coste. El más claro ejemplo está en Norwegian, que el viernes pasado firmó con Sepla el primer convenio colectivo de pilotos en España, en el que se regulan las condiciones laborales del colectivo. “Esperamos que Ryanair tome ejemplo, recapacite en su política y se dé cuenta de que en el siglo XXI no se puede crecer sin tener en cuenta a los empleados”, apuntan desde la Sección Sindica-. “De lo contrario, los pilotos de Ryanair siempre sabrán que existe para ellos un futuro más prometedor en cualquier otra compañía aérea”, añaden.