París.- El archivo del proyecto Notre-Dame-des-Landes ha llegado a su fin después de 50 años de lucha en el conflicto medioambiental más antiguo de Francia. El presidente galo, Emmanuel Macron, decidió este miércoles, después de años de polémicas, abandonar el proyecto de construcción del polémico aeropuerto, a 30 kilómetros de Nantes, en la Bretaña.
El primer ministro, Edouard Philippe, al término del Consejo de Ministros, explicó la decisión adoptada por el Gobierno: "No existen las condiciones para la construcción de este aeropuerto: los grandes proyectos de éxito fueron todos realizados porque eran ampliamente apoyados por la población; Notre-Dame-des-Landes es el aeropuerto de las divisiones", señaló.
El primer ministro anunció su apoyo al desarrollo del aeropuerto de Rennes-Saint-Jacques para "distribuir mejor el tráfico". También instruyó a la ministra de Transporte, élisabeth Borne, para evaluar la implementación de estos tres puntos: modernización de la terminal y extensión de la pista, mejora de los enlaces con París y desarrollo paralelo de Rennes-Saint-Jacques dentro de seis meses.
El aeropuerto de la discordia se había convertido para los ecologistas en el símbolo de los "grandes proyectos inútiles" durante casi 50 años de lucha, de bloqueos y de batallas legales.
A finales de la década de los 60 del pasado siglo nació la idea de un aeropuerto para el Oeste del país, como parte de la descentralización promovida por la delegación interministerial hacia la planificación regional y el atractivo regional. El aeropuerto de Nantes Atlantique, antes Château-Bougon, se consideró insuficiente para acoger a los millones de pasajeros que se esperaban. Se trataba de vuelos transatlánticos con capacidad para despegue y aterrizaje del emblemático avión nacional, el Concorde.
Los terrenos elegidos estaban a unos 20 kilómetros al norte de nantes y a 80 al sur de Rennes.
Principalmente, la localidad de Notre-Dame-des-Landes fue designada en 1968 como la ubicación preferencial. Mientras que su Ayuntamiento y los de las ciudades vecinas, aplaudieron el proyecto, algunos agricultores se opusieron.
Los primeros atisbos de oposición se centraron en 1972 en una asociación que estudió los efectos del ruido en Orly y recogió testimonios de los residentes en la zona. En enero de 1974, un decreto de prefectura fijó la zona de desarrollo diferido que permitió al departamento adquirir unas 1.200 hectáreas. El área total del proyecto comprendía 1.650 hectáreas.
El proyecto del aeropuerto quedó suspendido durante 15 años debido a la crisis del petróleo y a la llegada del tren de alta velocidad a Nantes (1989). La idea de un tercer aeropuerto parisino se promueve en 1994 y Notre-Dame-des-Landes permaneció en el cajón de un despacho hasta que al comienzo del presente siglo fue reactivado por el gobierno socialista de Lionel Jospin. En octubre del año 2000 una comisión interministerial decidió construir un nuevo aeropuerto, en sustitución de Nantes Atlantique, en el sitio de Notre-Dame-des-Landes". Pero dos meses después nacía la Asociación Ciudadana Intermunicipal de las poblaciones afectadas por el proyecto del aeropuerto (Acipa).
En 2003, se establece el comité asesor del debate público. Tres años más tarde, sobre la base del archivo de declaración pública (DUP), se organizó la consulta pública y en 2008, el Gobierno firmó un decreto declarando de utilidad pública la construcción del nuevo aeropuerto. Pero un año más tarde surgió el Colectivo de funcionarios electos que dudan de la necesidad del aeropuerto (CéDpa). El verano de ese año se celebró en la zona una acampada de acción ecologista a raíz de la cual nacieron las primeras ocupaciones “en defensa de los terrenos”.
En diciembre de 2010, el primer ministro Francois Fillon firmó un decreto que otorgaba la concesión a la empresa Vinci, por un período de 55 años los aeropuertos existentes de Nantes Atlantique y Saint-Nazaire Montoir y del futuro Notre-Dame-des-Landes. La apertura del nuevo aeródromo se programó para 2017.
Los recursos ante distintas jurisdicciones se multiplicaron. Varios agricultores iniciaron una huelga de hambre en protesta ante la prefectura de Nantes y el presidente FranÇois Hollande decidió que no habría intervención en la zona mientras no se resolvieran todos los recursos.
En la madrugada del 16 de octubre de 2012, siendo primer ministro Jean-Marc Ayrault y ministro de Interior Manuel Valls, el Gobierno puso en marcha la operación "César" para evacuar la zona. Pero los violentos enfrentamientos llevaron al Ejecutivo a suspender la operación.
Las ocupaciones de terrenos y las manifestaciones contra el aeropuerto se multiplicaron con numerosos incidentes violentos. Los juicios y recursos se fueron encadenando. En 2016, FranÇois Hollande propuso un referéndum loca que se llevó a cabo en departamento de Loire-Atlantique que el 26 de junio, dio la victoria a los partidarios de la transferencia del aeropuerto a Notre-Dames-des-Landes por un 55,1%.
Con la elección de Emmanuel Macron el suspense se reaviva. En una promesa de campaña, el presidente de la República anunció que tomaría una decisión después escuchar un informe final encargado a tres mediadores nombrados el pasado junio. A mediados del pasado mes de diciembre, los comisionadlos entregaron un informe sin tomar partido por la construcción del aeropuerto. Este miércoles el Gobierno francés ha decidido renunciar finalmente al proyecto después de casi medio siglo de controversias.