Ginebra.- La bajada de los precios del petróleo y el fortalecimiento del PIB global han hecho a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) revisar al alza su pronóstico de resultados económicos de la industria de aerolíneas, según el cual, éstas obtendrán este año 19.900 millones de dólares frente a los 18.000 millones previstos en junio, cifra que aumentará hasta los 25.000 millones de dólares en 2015.
Este mejor pronóstico se traducirá también en un mayor beneficio para los usuarios gracias a la reducción de costes y a una mayor eficiencia operativa.
La industria aérea es altamente competitiva. Tras el ajuste por inflación, se espera que el precio promedio de las tarifas aéreas de ida y vuelta (impuestos y tasas no incluidos) caiga un 5,1% en 2014; en el sector de carga aérea, las tarifas se abaratan incluso más (5,8%).
Los 25.000 millones de dólares de beneficio neto después de impuestos representan un margen del 3,2%, equivalente a 7,08 dólares de beneficio neto por pasajero en 2015, una cantidad que supera los 6,02 dólares de beneficio en 2014 y dobla con creces los 3,38 dólares por pasajero obtenidos en 2013.
Mejora también el retorno sobre el capital invertido (ROIC)) que crece un 7%, frente al 6,1% del pronóstico anterior para 2014, aunque baja 0,8 puntos porcentuales respecto al 7,8% del coste ponderado de los recursos (WACC), una muestra de que aún queda camino por recorrer antes de ver márgenes sostenibles.
"El panorama de la industria está mejorando. La economía mundial sigue recuperándose y se espera que la caída del precio del petróleo fortalezca los mercados el próximo año. El pronóstico es muy positivo, pero no debemos olvidar los riesgos que enfrentan las aerolíneas -como la inestabilidad política, los conflictos geopolíticos o la debilidad económica en algunas regiones, entre otros-, y un margen de beneficio neto del 3,2% apenas deja margen de reacción”, declaró Tony Tyler, consejero delegado de la IATA.
"Este pronóstico positivo es una gran noticia para todos. El sector de aerolíneas es una industria altamente competitiva, y tanto pasajeros como empresas se beneficiarán de las ventajas derivadas de la reducción de costes en 2015 gracias a unos precios del petróleo más bajos. Los inversores también disfrutarán de mayores beneficios con un ROIC más cerca del WACC. En resumen, una industria saludable contribuirá al objetivo de los gobiernos de estimular el crecimiento económico para acabar de una vez con la crisis financiera", dijo Tyler.
Los precios del petróleo han caído de forma sustancial en los últimos meses, y se espera que siga esta caída a lo largo de 2015, con un precio promedio del barril de Brent de 85 dólares. Si se cumplen las expectativas, será la primera vez que el precio medio del barril se coloque por debajo de los 100 dólares desde 2010 (79,4 dólares/barril).
El barril de combustible para la aviación costará 99,9 dólares en 2015. La factura de combustible se reducirá hasta los 192.000 millones de dólares -26% de los costes totales de la industria-, aunque cabe señalar que el impacto de esta reducción en el precio del combustible tardará en verse debido a la compra anticipada de combustible. Mejorar el consumo eficiente de combustible sigue siendo una prioridad para las aerolíneas. En 2014, la mejora en el consumo eficiente de combustible crece un 1,8%, y se espera que siga aumentando en 2015.
Por otro lado, la mejora de la utilización del espacio aéreo y de las infraestructuras aeroportuarias contribuirían a reducir en un 5% el combustible que se consume a causa de las deficiencias en estas áreas.