Madrid.- España adquirirá cuatro drones MQ-9 Reaper, originalmente conocidos como Predator B, a la empresa norteamericana General Atomics Aeronatical por un importe total de 161 millones de euros, según acordó este viernes el Consejo de Ministros.
El Departamento de Estado norteamericano, como publicó este diario el pasado día 7 de octubre, autorizó la venta a España de cuatro drones MQ-9 Reaper Block 5, equipos asociados y apoyo logístico, según informó la Agencia estadounidense de Cooperación de Seguridad (DSCA) de la Secretaría de Defensa.
El Gobierno españo, reunido ayer en Consejo de Ministros, acordó modificar los límites de aplicación presupuestaria, importes y anualidades para permitir al Ministerio de Defensa adquirir un sistema de aeronaves pilotadas por control remoto de gran autonomía y altitud media (RPAS MALE) estratégico operacional.
Para atender la necesidad operativa de las Fuerzas Armadas de contar con una capacidad persistente de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento basada en aviones tripulados remotamente (Remoted Pilot Air Systems- RPAS}, que apoye a los niveles estratégico y operacional dentro y fuera del territorio nacional, se ha optado por una solución a medio plazo con la adquisición de un grupo estratégico operacional RPAS MALE, disponible en el mercado.
La alternativa seleccionada consiste en un sistema Reaper con cuatro aviones MQ-9 Block 5, de la empresa General Atomics Aeronatical, junto con dos estaciones desplegables para controlar las plataformas aéreas (MGCS-Mobile Ground Control Stations), los sensores necesarios para su operación y los equipos de comunicación y apoyo.
El coste de la adquisición del Sistema supone un importe total de 161 millones de euros, con una financiación de 50 millones de euros con cargo al ejercicio 2015. Los 111 millones de euros restantes se distribuyen en cinco anualidades, de 2016 a 2020 ambas inclusive.
El General Atomics MQ-9 Reaper, originalmente conocido como Predator B, es un RPA desarrollado por General Atomics Aeronautical Systems para su uso en la Fuerza Aérea y la Armada de los EE UU, la Real Fuerza Aérea Británica, la Fuerza Aérea Italiana y la Fuerza Aérea Dominicana.
En su uso como vehículo aéreo de combate no tripulado, el MQ-9 es el primer UAV de ataque diseñado para vigilancia de larga duración y de gran altitud. Es una aeronave de mayor tamaño y de mayor capacidad que su predecesor, el MQ-1 Predator. El MQ-9 dispone de un turbopropulsor de 950 caballos de potencia, que supone una mayor potencia frente al motor de pistón de 119 caballos del Predator. El incremento de potencia permite transportar al Reaper 15 veces más cargamento y tener una velocidad de crucero tres veces mayor que la del MQ-1