Hamburgo.- El Observatorio Estratosférico para Astronomía Infrarroja (SOFIA) de la Nasa entró hace unos días en el hangar de Lufthansa Technik, en Hamburgo, para realizar la inspección correspondiente a los diez años.
Personal de vuelo, mantenimiento de aeronaves y personal científico del Centro de Investigación de Vuelo Armstrong trabajaron junto a 747 especialistas de Lufthansa para realizar una amplia gama de inspecciones y mantenimiento.
El observatorio SOFIA es un avión Boeing 747 modificado específicamente que vuela a altitudes entre 12 y 14 kilómetros, por encima de más del 99% del vapor de agua atmosférico de la Tierra, dando a los astrónomos la posibilidad de estudiar objetos celestes en longitudes de onda con los que no pueden ser visto desde observatorios terrestres.
El observatorio aéreo SOFIA, que estudia el universo en un espectro infrarrojo, es un programa conjunto entre la Nasa y la agencia espacial alemana DLR. Fue concebido para realizar observaciones conjuntas con los observatorios infrarrojos espaciales Spitzer y Herschel. Se trata de un avión-telescopio que, además de contribuir al progreso científico, es uno de los factores mayores en el desarrollo de técnicas de observación, de nuevos instrumentos y en la educación de científicos jóvenes y educadores en el campo de astronomía infrarroja.