IAG ha asignado a Vueling un pedido de 50 Boeing 737, cuya entrega está prevista para finales de 2026, lo que supone que dejará de operar con aviones Airbus, según ha informado IAG en su informe de resultados correspondiente al primer semestre del año.
La aerolínea ha explicado que esta asignación “refleja la confianza del grupo en los sólidos resultados de la compañía y apoyan su desarrollo a largo plazo”.
Asimismo, señala que “nuestra estrategia como compañía es clara y la nueva flota será un vehículo para garantizar el desarrollo sostenible y rentable de la aerolínea avanzando en nuestra ambición: reforzar el liderazgo de Barcelona, el mercado doméstico y los corredores internacionales más estratégicos”.
Se espera que esta transición sea paulatina, por lo que durante un tiempo la flota de Vueling contará con aeronaves de ambos fabricantes.











