SpaceX realizó el lunes la primera prueba de «fuego estático» de su Starship SN15. Los tres motores Raptor del lanzador se encendieron brevemente mientras la nave permanecía anclada al suelo en el centro de lanzamiento de Boca Chica, al sur de Texas.
Pero SN15 no permanecerá en el suelo por mucho tiempo. El fuego estático del lunes fue un control clave antes de un vuelo de prueba a gran altitud, que llevará al vehículo a unos 10 kilómetros pronto a los cielos de Texas, seguramente a finales de esta semana, como indicó en un tuit el fundador de SpaceX, Elon Kusk: “El fuego estático de la nave espacial SN15 se completó, preparándose para el vuelo a finales de esta semana”.
SN15 es el quinto prototipo de Starship en intentar este vuelo en menos de cinco meses. Los otros cuatro volaron bien hasta el final, fallando en el aterrizaje.
La nave espacial Starship y el cohete Super Heavy de SpaceX (denominados colectivamente Starship) representan un sistema de transporte totalmente reutilizable diseñado para llevar tanto a la tripulación como a la carga a la órbita terrestre, la Luna, Marte y más allá. Starship será el vehículo de lanzamiento más poderoso del mundo jamás desarrollado, con la capacidad de transportar más de 100 toneladas métricas a la órbita de la Tierra. La Nasa ha elegido recientemente como módulo de aterrizaje para su programa tripulado Artemisa la nave Starship y el lanzador Super Heavy.
Ambos elementos serán completa y rápidamente reutilizables, lo que podría reducir drásticamente el coste de los vuelos espaciales. SpaceX espera que Starship y Super Heavy estén listos y funcionando pronto; Musk dijo recientemente que cree que el sistema final estará en pleno funcionamiento para 2023.