La empresa norteamericana SpaceX lanzó este lunes a bordo de un cohete Falcon 9 su quinta misión Starlink desde Cabo Cañaveral, Florida, con sesenta satélites más para su red de banda ancha, lo que eleva el número total de plataformas Starlink desplegadas en órbita desde mayo pasado a 300.
La primera etapa de Falcon 9 había lanzado con anterioridad las misiones CRS-17, CRS-18 y JCSAT-18/Kacific 1 en mayo, julio y diciembre, respectivamente, del pasado año. Pero en el lanzamiento de este lunes, la primera etapa del cohete no logró aterrizar, como en otras ocasiones, en la barcaza dispuesta al efecto y cayó al océano Atlántico, lo que constituye el primer fallo registrado en esta operación desde 2016.
Los satélites Starlink se desplegaron en una órbita elíptica aproximadamente 15 minutos después del despegue. Antes del aumento de la órbita, los ingenieros de SpaceX llevarán a cabo revisiones de datos para asegúrese de que todos los satélites Starlink estén funcionando según lo previsto. Los satélites luego usarán sus propulsores de iones a bordo para moverse hacia sus órbitas previstas y altitud operativa de 550 km.
Cada satélite Starlink pesa aproximadamente 260 kg y presenta un compacto diseño de panel plano que minimiza el volumen, lo que permite una pila de lanzamiento densa para aprovechar al máximo las capacidades de lanzamiento del Falcon 9. Con cuatro potentes fases matriz y dos antenas parabólicas en cada satélite, una enorme cantidad de rendimiento se puede colocar y redirigir en poco tiempo, con un orden de magnitud a menor coste que el tradicional internet satelital.
Los satélites Starlink están a la vanguardia de la mitigación de desechos en órbita. Al final de su ciclo de vida, los satélites utilizarán su sistema de propulsión a bordo para desorbitar durante el curso de unos pocos meses. En el improbable caso de que su sistema de propulsión se vuelva inoperable, los satélites se quemarán en la atmósfera de la Tierra dentro de 1 a 5 años. Además, los componentes de Starlink están diseñados para una total capacidad de eliminación.
Starlink está destinado a dar servicio en el norte de EEUU y Canadá en 2020, expandiéndose rápidamente a una cobertura casi global de la población mundial para 2021.