El escudo térmico de última generación, que mide aproximadamente cinco metros de diámetro y que protegerá a los astronautas cuando protagonicen la segunda misión Artemisa, llegó esta semana al Centro Espacial Kennedy en Florida para su ensamblaje e integración con el equipo del módulo Orion.
Artemisa 2, la primera misión tripulada en la serie de misiones a la Luna y a Marte, confirmará que todos los sistemas de la nave operan como están diseñados en el entorno real del espacio profundo con astronautas a bordo.
La gran pieza de hardware de vuelo llegó desde las instalaciones de fabricación de Lockheed Martin cerca de Denver a bordo del avión Super Guppy de la Nasa el pasado martes y se transportó a la base de operaciones Neil Armstrong, donde se realiza el trabajo desde el día siguiente.
El escudo térmico es una base de armadura o esqueleto de titanio. Durante los próximos meses, los técnicos aplicarán Avcoat, un material ablativo que proporcionará la protección térmica.