El secretario de Estado de Defensa (SEDEF), Ángel Olivares, visitó este martes las instalaciones de Indra en las que se desarrollan los sistemas tecnológicos de última generación que las Fuerzas Armadas emplearán en sus misiones en las próximas décadas.
Fernando Abril-Martorell, presidente de Indra, e Ignacio Mataix, consejero director general de Transporte y Defensa de la compañía, mostraron al SEDEF los trabajos que Indra lleva a cabo en algunos de los programas de defensa más importantes para el futuro de las Fuerzas Armadas, entre ellos el avión de combate Eurofighter.
El secretario de Estado concluyó su visita señalando que ha fortalecido su grado de conocimiento del liderazgo internacional y las altas capacidades de Indra en sistemas tecnológicos de Defensa, así como su experiencia en programas internacionales.
En su visita, el secretario de Defensa mostró interés en la evolución del Eurofighter, para lo que visitó las zonas de trabajo en las que se desarrolla y fabrica la suite de autoprotección del avión multirol más avanzado del mundo. De este sistema de defensa electrónica, conocido como DASS Praetorian, depende la capacidad de supervivencia de la aeronave en combate y el éxito de las misiones en las que participa. Indra aborda en este momento su evolución y prepara la aeronave para que pueda detectar y contrarrestar las amenazas que surgirán en los próximos años.
A continuación, Angel Olivares conoció la zona en la que se desarrolla el radar Captor, el sistema más importante del Eurofighter, que dota a la aeronave de capacidad para ‘ver’ al enemigo antes de ser detectado. Allí pudo comprobar cómo se fabrica el radar de barrido mecánico que actualmente porta la aeronave y cómo se avanza en el desarrollo del nuevo radar de barrido electrónico, que incrementará aún más sus capacidades.
En las instalaciones de Indra en Torrejón de Ardoz, Angel Olivares visitó el área en la que Indra fabrica, monta y prueba componentes del Eurofighter y del avión de transporte militar A400M en la segunda sala limpia más grande de Europa, en la que dichos sistemas se fabrican en un ambiente controlado y libre de partículas para asegurar su perfecto funcionamiento. También pudo visitar la línea de ensamblaje de radares 3D LANZA, que conforman la espina vertebral de la defensa aérea de España.
Indra es el coordinador nacional industrial español en el programa europeo de Defensa FCAS (Future Combat Air System), el mayor programa conjunto europeo de Defensa hasta el momento y el más ambicioso en términos de desarrollo tecnológico.
Asimismo, es la única empresa española que aparece entre las cien principales compañías de Defensa del mundo, y tiene un alto nivel de reconocimiento internacional por el desarrollo de proyectos críticos para la defensa nacional de los países para los que trabaja, por su participación en los grandes programas europeos y en el marco de la OTAN, por su capacidad exportadora demostrada y por un equipo humano de alto valor añadido.
Indra participa en la actualidad en nueve consorcios del EDIDP (European Defence Industrial Development Programme) y actúa como coordinador en 3 de los 5 liderados por España, entre otros el programa PESCO para el Mando y Control Estratégico, probablemente el más importante de todos ellos, en el que participan España, Italia, Alemania, Francia, Luxemburgo y Portugal.
Su producto tecnológico (radares, defensa electrónica, mando y control, sistemas de misión, etc.), tiene un alto reconocimiento en la industria de Defensa, así como su capacidad para abordar proyectos complejos en todo el mundo. Además, participa en programas internacionales tanto europeos como el EFA, A400M, NH90, Meteor o ESSOR, como no europeos y del entorno de la OTAN como el ESSM, FLEPS, ACCS y muchos otros.
Con más de 30 años de experiencia en el sector de la Defensa, Indra tiene en España cerca de 28.000 empleados (de los 49.000 totales), opera en más de 140 países, está presente en 30 provincias con sedes repartidas por todas las CCAA y, en concreto en el sector de la defensa, más de 6.000 profesionales en plantilla y una inversión estable y recurrente en I+D (más de 1.000 millones de euros invertidos en los últimos seis años).
Seguimos con las puertas giratorias…