El sector aeroespacial español avanza con paso firme hacia el futuro gracias al proyecto MERLIn (Motor Eficiente y Reutilizable para Lanzadores Internacionales). Con una inversión de 11,6 millones de euros, este desarrollo se posiciona como el segundo más relevante del Plan Tecnológico Espacial (PTE) de CDTI Innovación y la Agencia Espacial Española. El objetivo es claro: consolidar a España como referente en propulsión espacial y nuevas tecnologías.
ITP Aero lidera un consorcio integrado por Pangea Aerospace, Sener y AENIUM. Juntas, estas compañías han unido fuerzas para desarrollar el primer motor aerospike del mundo listo para volar, un avance que promete revolucionar la industria espacial. Cada participante aporta su experiencia clave: desde el diseño del motor por Pangea Aerospace hasta la fabricación aditiva avanzada de AENIUM.
Pangea Aerospace, además, encabeza el presupuesto de MERLIn con una subvención de 3,9 millones de euros, representando el 50% del total del proyecto. Con sedes en Barcelona y Toulouse, esta start-up demuestra que la innovación también tiene sello español.
ARCOS, el motor del futuro
El motor ARCOS, con su tobera aerospike, no solo promete un rendimiento un 15% más eficiente que los motores tradicionales, sino que también incorpora sostenibilidad al usar metano y oxígeno líquido, reduciendo las emisiones de CO2 hasta un 50%. Con un empuje de 750 kN, este innovador motor está diseñado para reusarse en múltiples misiones, abriendo nuevas oportunidades para la reutilización completa de lanzadores.
La colaboración público-privada representada por MERLIn es un ejemplo del compromiso del Gobierno español por potenciar el sector aeroespacial. Integrado en el PERTE Aeroespacial, el proyecto refuerza la competitividad nacional y prepara a la industria para responder a los retos de las próximas décadas. Con el apoyo de los 70 millones de euros del PTE, España está posicionándose para liderar en el ámbito de la propulsión y la exploración espacial.