Aertec reunió este miércoles en Madrid a representantes del INTA, Airbus y Moeve en un encuentro orientado a analizar los desafíos y oportunidades que marcarán la transición hacia una aviación más eficiente y sostenible. Bajo el título “El futuro de la aviación sostenible”, la sesión congregó a delegados ministeriales, profesionales del sector y prensa especializada, y sirvió para renovar públicamente el compromiso de alcanzar cero emisiones netas en 2050.
El acto fue inaugurado por Antonio Gómez-Guillamón, CEO y cofundador de Aertec, quien repasó los avances de la compañía en materia de ingeniería aplicada a la sostenibilidad. A continuación, tuvo lugar una mesa redonda integrada por Susana Carballo, directora de Ingeniería en Airbus Commercial Aircraft en España; Vicente Pérez Mena, responsable de Aviación Comercial en Moeve; María del Pilar Argumosa, del Departamento de Propulsión del INTA; y Pedro Becerra, director general de Sistemas Aeroespaciales y de Defensa en Aertec, moderados por Carlos Berenguer, director general de Aviación en la compañía.
En su intervención inicial, Berenguer lamentó la percepción social que sitúa a la aviación como “el enemigo climático del siglo XXI”. Recordó que la industria mantiene un compromiso claro con la descarbonización y resaltó que la sostenibilidad “no es una opción, es una necesidad”. Subrayó además que las nuevas tecnologías y la colaboración sectorial serán determinantes para lograr los objetivos planteados.
La representación de Airbus puso el foco en la trayectoria ya recorrida. Susana Carballo recordó que, en las últimas tres décadas y media, el sector ha reducido sus emisiones un 50% gracias a mejoras en aerodinámica, eficiencia de motores y materiales avanzados. Destacó proyectos como nuevas configuraciones de ala, avances en flujo laminar natural, el diseño X-wing y las investigaciones vinculadas al hidrógeno, señalando que la hoja de ruta de la compañía combina acciones a corto, medio y largo plazo.
En el ámbito de los combustibles sostenibles, Vicente Pérez (Moeve) insistió en la relevancia de los SAF, sobre los que recae el 65% de las reducciones previstas para 2050. Reclamó una evolución normativa que incentive su uso y la implicación de toda la cadena, desde productores hasta usuarios finales. Subrayó también la importancia de desarrollar combustibles sintéticos (eSAF) y avanzar en la eficiencia de las vías tecnológicas asociadas.
Por su parte, Pilar Argumosa (INTA) apuntó que muchas de las tecnologías necesarias ya existen y que la clave está en su evolución y maduración. Señaló que opciones disruptivas como la electrificación o el hidrógeno son viables, pero requieren avanzar primero en aviones de menor tamaño para garantizar reducciones inmediatas. Destacó asimismo la necesidad de comenzar ahora el desarrollo de tecnologías destinadas a operar plenamente en horizontes de largo plazo.
Pedro Becerra (Aertec) destacó la ganancia de eficiencia lograda por la generación actual de aeronaves y puso el foco en innovaciones en desarrollo. Valoró los avances en sistemas eléctricos de alto voltaje en corriente continua, orientados a reducir peso y mejorar consumos. Asimismo, defendió que la optimización de tráfico aéreo mediante IA podría reducir emisiones en plazos muy cortos.
Los participantes también abordaron los principales retos que enfrenta la industria. Carballo señaló la necesidad de actualizar el marco regulatorio para acomodar nuevas tecnologías y nuevas operaciones, como los tiempos de repostaje vinculados a combustibles alternativos. Pérez insistió en el diseño de una cadena de valor eficiente para los SAF, desde la recogida hasta el repostaje. Argumosa recordó que alcanzar los objetivos requiere tiempo y financiación, mientras que Becerra advirtió que el contexto geopolítico podría retraer recursos destinados a investigación, aunque aseguró que las oportunidades superan ampliamente a las limitaciones.
El encuentro concluyó con una llamada conjunta a la cooperación de todos los agentes implicados para avanzar en la sostenibilidad aérea. En el turno final de intervenciones, representantes institucionales y del sector plantearon cuestiones sobre vuelos de largo recorrido, marcos legislativos europeos, nuevos fuselajes y el desarrollo de los SAF en España, subrayando la complejidad de una transición que exige innovación constante, coordinación y visión a largo plazo.











