El personal de tierra de la aerolínea KLM ha anunciado que convocará una jornada de huelga mañana, 18 de septiembre de 2019. Se trata de la tercera que mantienen los trabajadores en dos semanas con el objetivo de aumentar la presión tras el estancamiento de las negociaciones salariales.
Jan van den Brink, quien negoció con KLM en nombre del sindicato FNV la semana pasada, ha asegurado que “los empleados hacen trabajos pesados e importantes por poco dinero. Y KLM se niega a mejorar eso de una manera decente”.
Los paros, que se realizarán desde las 13 horas hasta las 17 horas, pueden llegar a ser secundados por los más de 15.000 empleados que la aerolínea tiene en el segmento de tierra.
La semana pasada, los sindicatos holandeses se reunieron con KLM para llegar a un acuerdo sobre un nuevo convenio colectivo. La aerolínea presentó una oferta salarial promedio del 2,5%, mientras que los sindicatos quieren un 4% adicional.
“KLM solo quiere contratar personas por el 75% de una semana laboral normal. Debido a los horarios pesados, los empleados no pueden tener otro trabajo. Como resultado, estos empleados tienen unos ingresos muy bajos, mientras están desplegados en los servicios más pesados”, dice Van den Brink.
Otro problema con el trabajo del personal de tierra es la relación sesgada entre el número de empleados permanentes y los trabajadores temporales. “Hay miles de empleados temporales en KLM, que siempre están de guardia, pero que rara vez están empleados. Eso significa mucha incertidumbre para los trabajadores temporales. Para los empleados permanentes, el trabajo se vuelve más difícil cuando trabajan con muchos trabajadores temporales ya que tienen que ser re-entrenados, tener servicios más cortos y la organización de las vacaciones se hace más difícil”, dice Van den Brink.
Es por eso que FNV quiere, además del aumento salarial, que la relación entre fijos y temporales mejore y que los horarios se vuelvan más ligeros. Las negociaciones para un nuevo convenio colectivo se han estado ejecutando desde mayo.