El astronauta de la Nasa Chris Williams se embarcará en su primera misión a la Estación Espacial Internacional (EEI) en noviembre, como ingeniero de vuelo y miembro de la tripulación de la Expedición 74. Williams viajará a bordo de la nave rusa Soyuz MS-28 junto a los cosmonautas de Roscosmos Sergey Kud-Sverchkov y Sergei Mikaev. El lanzamiento tendrá lugar desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán.
Está previsto que la tripulación permanezca aproximadamente ocho meses en la estación orbital. Durante ese tiempo, Williams participará en investigaciones científicas y demostraciones tecnológicas destinadas a preparar a la humanidad para futuras misiones espaciales de larga duración y a generar beneficios tangibles en la Tierra.
Chris Williams fue seleccionado como astronauta por la Nasa en 2021 e integró la 23 promoción de candidatos, graduándose en 2024. Inmediatamente después de completar su formación inicial, comenzó el entrenamiento para su primera asignación a bordo de la EEI.
Natural de la ciudad de Nueva York y criado en Potomac (Maryland), Williams posee una licenciatura en Física por la Universidad de Stanford y un doctorado en Física por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), donde se especializó en astrofísica. Más adelante, completó una residencia en Física Médica en la Facultad de Medicina de Harvard. Antes de unirse al cuerpo de astronautas, trabajaba como físico clínico e investigador en el Brigham and Women’s Hospital de Boston.
Una plataforma clave para el futuro
Desde hace más de 20 años, la Estación Espacial Internacional ha sido un laboratorio único para avanzar en el conocimiento científico y probar tecnologías en condiciones de microgravedad. La plataforma orbital es un elemento clave para comprender y superar los desafíos del vuelo espacial de larga duración, así como para ampliar las oportunidades comerciales en órbita baja terrestre.
Con empresas privadas asumiendo cada vez más responsabilidades en el transporte y desarrollo de infraestructuras en órbita baja, la NASA puede enfocar sus recursos hacia sus objetivos estratégicos de exploración en el espacio profundo, con destino a la Luna y Marte. La misión de Chris Williams se enmarca dentro de este esfuerzo por consolidar el ecosistema espacial actual y preparar el camino hacia el futuro de la exploración tripulada.