Boeing entregó el pasado año 157 aviones comerciales, un 60% menos que en 2019, que ya había entregado la mitad que el año anterior, con lo que encadena dos años sucesivos de crisis, la más grave en el último medio siglo, según los datos hechos públicos este martes por el constructor aeronáutico norteamericano.
El número de pedidos de aviones comerciales registrados el pasado año fue de 184, de ellos, 112 correspondieron a modelo B737 MAX cuya producción estuvo paralizada casi todo el año y los aviones en poder de las compañías fueron inmovilizados durante más de 20 meses tras el doble accidente que provocó la muerte de 346 personas.
De esos 112 aviones 737 MAX pedidos el pasado año, destacan los 75 encargados por Ryanair y los 25 por Virgin Australia.
Mientras tanto, su competidor, el fabricante aeronáutico europeo Airbus informó cuatro días antes de que, a pesar de la crisis provocada por la pandemia de coronavirus en el transporte aéreo y en la producción aeronáutica, había cerrado el año 2020 con 268 pedidos netos y había efectuado la entrega de 566 aviones comerciales a 87 clientes.
«A través de la pandemia global, tomamos medidas significativas para adaptarnos a nuestro nuevo mercado, transformar nuestro negocio y cumplir con nuestros clientes comerciales, de defensa, espaciales y de servicios en 2020», dijo Greg Smith, vicepresidente ejecutivo de operaciones empresariales y director financiero de Boeing.
«La reanudación de las entregas del 737 MAX en diciembre fue un hito clave a medida que fortalecemos la seguridad y la calidad en toda nuestra empresa. También continuamos con las inspecciones exhaustivas de nuestros aviones 787 para asegurarnos de que cumplen con nuestros más altos estándares de calidad antes de la entrega”.
“Al tiempo que limitamos nuestras entregas 787 para el trimestre, estas inspecciones integrales representan nuestro enfoque en la seguridad, la calidad y la transparencia, y estamos seguros de que estamos tomando las medidas correctas para nuestros clientes y para la salud a largo plazo del programa 787”.
“A medida que continuamos navegando a través de la pandemia, estamos trabajando en estrecha colaboración con nuestros clientes globales y monitoreando la lenta recuperación del tráfico internacional para alinear la oferta con la demanda del mercado en todos nuestros programas de fuselaje ancho”, concluyó Smith.