Boeing ha cerrado el mes de septiembre con 55 aeronaves comerciales entregadas, su cifra mensual más alta desde 2018, consolidando así un notable repunte en su ritmo de producción. Entre las entregas destacan 40 unidades de la familia 737 MAX, de las cuales cuatro se destinaron a aerolíneas latinoamericanas: una para GOL Linhas Aéreas y tres para Copa Airlines, de Panamá.
El resultado refuerza la tendencia positiva que la compañía viene registrando a lo largo del año. Entre enero y septiembre de 2025, Boeing ha entregado 440 aeronaves a aerolíneas comerciales, empresas de leasing y al Gobierno de los Estados Unidos, lo que supone un incremento de más del 50% en comparación con el mismo periodo de 2024, cuando se contabilizaron 291 entregas.
El repunte refleja los esfuerzos de Boeing por recuperar la estabilidad en su cadena de suministro y mantener su compromiso con los estándares de calidad y seguridad en la producción. La compañía ha reforzado sus procesos internos, optimizado la planificación de componentes críticos y trabajado en estrecha colaboración con sus proveedores para garantizar un flujo más regular de entregas.
El desempeño del 737 MAX continúa siendo un pilar esencial en la recuperación del fabricante estadounidense. Con 40 unidades entregadas solo en septiembre, el modelo mantiene su posición como el más demandado dentro del catálogo comercial de Boeing, impulsado por la renovación de flotas y la expansión de capacidad de las aerolíneas en distintos mercados.
El crecimiento del número de entregas también refleja una mejor coordinación operativa en sus líneas de montaje, particularmente en los programas 737 y 787, los cuales concentran la mayor parte de la producción.
Más de 800 nuevos pedidos en lo que va de año
Además del aumento en las entregas, Boeing ha experimentado un año dinámico en términos de nuevos pedidos. Hasta septiembre, la compañía ha registrado 821 nuevas órdenes de compra de aeronaves comerciales. Solo en el mes de septiembre, las aerolíneas y arrendadores realizaron 96 pedidos, distribuidos entre 32 unidades de la familia 737 MAX y 64 del 787 Dreamliner.
El 787 Dreamliner, enfocado en vuelos de largo alcance y eficiencia operativa, continúa consolidándose como una opción clave para las aerolíneas que buscan reducir emisiones y optimizar costes de combustible. Su crecimiento en la cartera de pedidos evidencia la recuperación del segmento de aviación internacional, que ha mostrado un repunte sostenido tras la plena normalización de la demanda global.
Los resultados de septiembre sitúan a Boeing en una posición favorable para cerrar 2025 con sus mejores cifras de entregas en siete años, consolidando así su proceso de recuperación industrial tras los desafíos de años anteriores.
La evolución del mercado aéreo global, con un tráfico de pasajeros que continúa creciendo y aerolíneas que apuestan por la renovación de flotas más eficientes, ha favorecido la demanda de nuevos aviones, especialmente en los segmentos de corto y medio alcance. El compromiso de Boeing con la calidad y la fiabilidad en la fabricación, junto con una gestión más predecible de los plazos de entrega, está permitiendo que la compañía recupere la confianza de sus clientes y refuerce su posición en el mercado frente a una competencia cada vez más exigente.
América Latina, un mercado en expansión
La entrega de nuevas aeronaves a GOL Linhas Aéreas y Copa Airlines refuerza la relevancia estratégica de América Latina dentro del negocio global de Boeing. La región mantiene una demanda sostenida de aeronaves de nueva generación, impulsada por el crecimiento del tráfico aéreo, la recuperación económica y los planes de expansión de las principales aerolíneas.
Los 737 MAX entregados en septiembre contribuirán a mejorar la eficiencia de las operaciones regionales, reduciendo el consumo de combustible y las emisiones de CO2. Para Boeing, la región sigue siendo un mercado clave en su estrategia de largo plazo, tanto por su potencial de crecimiento como por la renovación de flotas que se está llevando a cabo en distintos países.
Con más de 440 entregas realizadas y 821 pedidos registrados hasta septiembre, Boeing encara el último trimestre del año con una cartera sólida y perspectivas de crecimiento sostenido. La compañía prevé mantener el ritmo de producción en sus principales programas, al tiempo que continúa reforzando su red de proveedores y avanzando en nuevas mejoras de eficiencia operativa.
El repunte en las entregas de 2025 marca un punto de inflexión para Boeing, que parece consolidar su regreso a niveles de actividad similares a los previos a la pandemia y a los años de mayores entregas en su historia reciente. Todo apunta a que 2025 será recordado como el año en que el fabricante estadounidense recuperó la estabilidad industrial y reafirmó su posición como uno de los líderes indiscutibles de la aviación comercial mundial.