Ante la próxima Junta General de Accionistas, a celebrar el próximo día 16 de abril, Airbus ha presentado ante el Mercado de Valores un documento en el que previene que sus clientes podrían intentar cancelar o posponer la entrega de aviones y helicópteros a medida que la crisis del coronavirus continúa propagándose por todo el mundo.
En dicho documento, el constructor aeronáutico europeo ha cancelado su pronóstico para el presente año, habida cuenta de que sus clientes, las aerolíneas, afrontan una crisis histórica de reducción de vuelos debido a la pandemia Covid-19.
El propio CEO, Guillaume Faury, advirtió antes que varias aerolíneas habían pedido diferir las entregas, pero que la mayoría seguía pagando sus depósitos. “Las condiciones de mercado y económicas más débiles en China y sus efectos colaterales en otros mercados podrían dar lugar a solicitudes por los clientes de posponer la entrega o cancelar pedidos existentes para aviones y helicópteros”, dice el documento presentado, aunque Faury dijo anteriormente que había algunos signos de recuperación en China.
“Hay muchos factores que podrían causar que los resultados y desarrollos reales difieran materialmente de los expresados o implícitos en las prospecciones establecidas”, indica el texto. Y entre esos factores destaca:
– Cambios en las condiciones económicas, políticas o de mercado generales, incluida la naturaleza cíclica de algunos de los negocios de Airbus;
– Interrupciones significativas en los viajes aéreos (incluso como resultado de la propagación de enfermedades o ataques terroristas);
– Fluctuaciones del tipo de cambio de divisas, en particular entre el euro y el dólar estadounidense;
– La ejecución exitosa de los planes internos de desempeño, incluidos los esfuerzos de reducción de costes y productividad;
– Riesgos de rendimiento del producto, así como riesgos de desarrollo y gestión de programas;
– Negociaciones de desempeño o contrato de clientes, proveedores y subcontratistas, incluidos problemas de financiación;
– Competencia y consolidación en la industria aeroespacial y de defensa;
– Conflictos laborales significativos de negociación colectiva;
– El resultado de los procesos políticos y legales, incluida la disponibilidad de financiación gubernamental para ciertos programas y el tamaño de los presupuestos de defensa y adquisición de espacio;
– Costes de investigación y desarrollo en relación con nuevos productos;
– Riesgos legales, financieros y gubernamentales relacionados con las ventas internacionales;
– Procedimientos legales e investigaciones y otros riesgos e incertidumbres económicos, políticos y tecnológicos;
– El impacto total del brote de la pandemia Covid-19.