El director de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (AESA), Florian Guillermet, y el CEO de la Administración de la Organización para la Cooperación Conjunta en Materia de Armamento (OCCAR), Joachim Sucker, han firmado el pasado miércoles en Bonn, Alemania, el primer acuerdo formal entre ambas organizaciones para mejorar la seguridad del sistema de aviación europeo permitiendo el intercambio de información clasificada sobre programas militares.
La OCCAR es una organización internacional cuya actividad principal es la gestión a lo largo de toda la vida útil de programas complejos de cooperación con equipos de defensa. Entre los programas militares en los que la EASA ya participa plenamente se encuentran el proceso de mantenimiento de la aeronavegabilidad del A400M, así como la certificación del motor Eurodrone. En esa ocasión, la EASA organizó recientemente una reunión sobre la propulsión de Eurodrone con la OCCAR, los Estados miembros de la EASA y grupos de la industria de la aviación.
En el actual entorno geopolítico de conflictos y tensiones crecientes, la cooperación civil-militar es vital para ayudar a acelerar el desarrollo tecnológico en la aviación y gestionar de manera eficiente la seguridad de productos militares específicos a lo largo de su ciclo de vida. Esto tiene dos contextos clave cuando los programas militares se derivan de aeronaves civiles, es importante que se pueda intercambiar información sobre la aeronavegabilidad para garantizar la seguridad de los productos tanto civiles como militares; y para los casos en que la seguridad de las aeronaves o de los sistemas relacionados interactúa con otro tráfico aéreo, por ejemplo, a través del uso compartido del espacio aéreo civil o la interoperabilidad con los sistemas de gestión del tráfico aéreo (ATM) y otros sistemas relacionados operados por organizaciones civiles.
La EASA se compromete a apoyar proyectos militares cuando sea apropiado y existan responsabilidades claras establecidas para las organizaciones involucradas.