Tokio. – La compañía aérea japonesa All Nippon Airways (ANA), que tiene la mayor flota de aviones Boeing 787 Dreamliner, canceló el pasado sábado otros 379 vuelos que tenía programados entre el 1 y el 18 de febrero. Con éstas suman ya 828 las cancelaciones de vuelos de ANA desde el aterrizaje de emergencia del pasado día 16.
Por su parte, la otra aerolínea nipona, Japan Airlines (JAL), ha suspendido cuatro vuelos que operaban la ruta Tokio-San Diego para ayer y hoy, que se suman a los ocho vuelos originalmente programados para la semana pasada y que fueron igualmente cancelados.
Los 50 Dreamliners en servicio en todo el mundo permanecen en el suelo desde el pasado día 16 debido a los problemas registrados en diversos aviones de este modelo, especialmente en sus baterías.
ANA, que tiene 17 de esos aviones, anunció que las cancelaciones han afectado a más de 82.620 pasajeros. La aerolínea japonesa transporta a cerca de 3,7 millones de pasajeros cada mes en rutas nacionales e internacionales.
La aerolínea, que había puesto al Dreamliner en el centro de su estrategia de crecimiento debido a su menor peso y eficiencia en el consumo de combustible, podría tener que reducir su plan para los próximos dos años debido al creciente coste de mantener en tierra al nuevo modelo.
Según los agentes de la FAA norteamericana que investigan el incendio en una batería de un Boeing 787 señalaron la pasada semana que tardarán en llegar a la conclusión de sus investigaciones, debido a la avanzada tecnología del avión, por lo que se prevé la prolongación de la prohibición de operar los Dreamliners.