Moscú.- Cinco personas murieron el pasado sábado al estrellarse un Túpolev Tu-204 de la compañía Red Wings con doce personas a bordo en el aeropuerto moscovita de Vnúkovo.
El avión, procedente de la República Checa, se incendió tras salirse de la pista al aterrizar en el aeropuerto. Los equipos de rescate localizaron la caja negra del Tupolev-204.
«El avión se posó en la zona de aterrizaje correcta pero por una razón indeterminada no pudo detenerse en la pista», dijo Alexander Neradko, director de la agencia federal de transporte aéreo, en declaraciones a una cadena de televisión.
El reducido número de víctimas se explica porque el avión, con capacidad para 240 pasajeros, iba prácticamente vacío exceptuando a los ocho miembros de la tripulación, que volvían a Rusia tras un vuelo a la República Checa. Un vídeo filmado con un teléfono móvil y publicado en Internet muestra cómo un gran fragmento del avión cayó en la autopista y golpeó a varios coches.
El avión se rompió en tres partes y obligó a cerrar temporalmente la autopista que va de Kiev a Vnúkovo, la localidad donde está aeropuerto, el tercero más importante de Moscú. Según una fuente de los servicios de seguridad, la causa más probable del accidente es el mal estado del aparato. El avión fue construido hace cuatro años en la planta aeronáutica Aviastar.
El organismo ruso de control sobre el transporte aeronáutico (Rosaviatsiya) manifestó que había enviado la víspera a la empresa Túpolev una carta advirtiendo sobre posibles problemas con el sistema de freno en los modelos Tu-204.