Baikonur.– La nave Soyuz TMA-07M, lanzada ayer hacia la Estación Espacial Internacional (ISS) con tres astronautas a bordo, se separó con éxito del cohete Soyuz-FG y puso rumbo a la instalación orbital, informó un portavoz de la agencia espacial rusa Roscosmos.
La Soyuz TMA-07M despegó de Baikonur, en Kazajstán, con el astronauta ruso Román Romanenko, el estadounidense Thomas Marshburn y el canadiense Chris Hadfield. Según está previsto, la nave llegará a la ISS mañana a las 14:12 GMT.
En los 147 días que durará su misión, la nueva tripulación se encargará de descargar cuatro naves espaciales Progress, la nave europea ATV-4 y la primera sonda de transporte comercial Dragon, de fabricación estadounidense.
Los cosmonautas también llevarán a cabo dos salidas espaciales y numerosas pruebas científicas. Para los tres, se trata de su segunda misión a la ISS, aunque los astronautas americanos lo realizan por primera vez a bordo de una Soyuz rusa. Serán recibidos en la estación por los rusos Oleg Novitski y Evgueni Tarelkin y el estadounidense Kevin Ford, que comenzaron su misión el pasado 23 de octubre.