Madrid.- “No podemos permitir conflictos en un sector estratégico”, dijo ayer la ministra de Fomento, Ana Pastor, a propósito del conflicto suscitado en la compañía Iberia, tras el anuncio del plan de restructuración empresarial, con una previsión de supresión de 1.500 puestos de trabajo y un calendario de huelgas.
La ministra señaló en el Foro “Cinco Días” las limitaciones del Gobierno y el papel de su Ministerio en el ordenamiento jurídico en un sector estratégico como el del transporte aéreo, tan vinculado al turismo. En este sentido, la titular de Fomento subrayó la voluntad del Gobierno de la existencia de grandes compañías aéreas viables.
Pastor apostó por preservar la españolidad de la compañía Iberia, por su plan claro de futuro respecto al largo radio manteniendo el corto y medio radio. Defendió la potenciación del hub madrileño de Barajas y lanzó un mensaje de entendimiento y negociación entre las partes en conflicto.
La ministra subrayó que el aéreo es un sector estratégico para España y un auténtico motor de crecimiento de la economía que representa el 7% del PIB nacional. En primer lugar, por su gran impacto económico, como factor determinante para el desarrollo de las relaciones comerciales y por su conexión con el turismo. El empleo directo que generan las empresas cuya actividad se realiza en torno a los aeropuertos asciende a 140.000, que aumenta a 440.000 si se suman los empleos indirectos e inducidos.
El sector aéreo es además estratégico por su contribución social en términos de conectividad y vertebración territorial, singularmente respecto a los territorios no peninsulares: Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla.
En las reuniones que ha mantenido la ministra con representantes de Iberia les ha trasladado la necesidad de conciliar sus planes de futuro con los intereses generales del país derivados de la obligación que tiene el Gobierno de garantizar la conectividad aérea y la necesidad de mantener el peso de la aviación comercial española en el contexto internacional. Ha destacado asimismo la importancia del transporte aéreo en el sector turístico y que Iberia está indisociablemente unida a la marca España.
“Por todo ello, no solo como ministra del Gobierno de España, sino también en nombre de todos los ciudadanos, usuarios del transporte aéreo, pido desde aquí responsabilidad a todos en este momento, a los directivos de la compañía y a los representantes sindicales, y asimismo les pido diálogo y negociación para llegar al mejor acuerdo para los trabajadores, para la compañía, para los ciudadanos y para España”, ha añadido.